Manuel José Othón Poeta mexicano

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Allá, tras las montañas orientales,

surge de pronto el sol, como una roja

llamarada de indendios colosales,

y sobre los abuptos peñascales

ríos de lava incandescente arroja.

Entonces, de los flancos de la sierra

bañada en luz, del robledal oscuro,

del espantoso acantilado muro

que el paso estrecho a la hondonada cierra;

de los profundos valles de los lagos

azules y lejanos que se mecen

blandamente del aura a los halagos,

y de los matorrales que estremecen

los vientos, de las flores, de los nidos,

de todo lo que tiembla o lo que canta,

una voz poderosa se levanta

de arpegios y sollozos y gemidos.

Mugen los bueyes que a los pastos llevan

silbando los vaqueros, mansamente

y perezosos van, y los abrevan

en el remanso de la azul coriente.

Y mientras de las cabras el ganado

remonta, despuntando los gramales,

torpes en el andar, los recentales

se quejan blanda y amorosamente

con un tierno balido entrecortado.

Abajo, entre la malla de raíces

que el tronco de las ceibas ha formado,

grita el papán y se oye en el sembrado

cuchichiar a las tímidas perdices.

Mezcla aquí sus ruidos y sus sones

todo lo que voz tiene: la corteza

que hincha la savia ya, crepitaciones,

su rumor misterioso la maleza

y el clarín de la selva sus canciones.

Y a lo lejos, muy lejos, cuando el viento,

que los maizales apacible orea,

sopla del septentrión, se oye el acento

y algazara que, locas de contento,

forman las campanitas de la aldea….

¡Es que también se alegra y alboroza

el viejo campanario! La mañana

con húmedas caricias lo remoza:

sostiene con amor la cruz cristiana

sobre su humilde cúpula; su velo,

para cubrirlo, tienden las neblinas,

como cendales que le presta el cielo

y en torno de la cruz las golondrinas

cantan, girando en caprichoso vuelo.

 1858-1906

Este  poeta Mexicano nació en San Luis Potosí, el 14 de junio de 1858.

 

Poeta descriptor de la naturaleza conscientemente
apartado de las tendencias literarias de su tiempo, la resonancia
de su magnífica producción poética -fuertemente enraizada en la
tradición de Horacio, Virgilio, Chénier, Lope, Pagaza- constituye
un hito singularísimo. dentro del conflictivo período en que
confluyen las aguas del último romanticismo y el primer
modernismo.

Ni plenamente romántico ni atraído por las musas
parnasianas y simbolistas en boga, lo clásico en él es resonancia
de un temperamento, la coincidencia con un peculiar impulso creador,
como señala Anderson Imbert.

  

«En la paz de las aldeas gustaba Ohton de
pasar la vida, donde es mas fácil salir al campo… Desvestido el
ánimo de todo sentimiento efímero, vuelve a su profundidad sustantiva,
toma alli lo esencial, lo desinteresado, que es a la vez lo superfluo
de las imágenes del mundo, y vuelca sinceramente sobre el espectáculo
de la naturaleza el tesoro de su mas hondas actividades: la religión
el deber, el gusto, el dolor de la vida.

La existencia de Manuel
José Othon, por otra parte según era su descuido por las cosas
exteriores y según era su hábito de ensimismamietno y de éxtasis,
parece mas desligada aun de la realidad accesoria por aquel maravilloso
don de olvido, que le conociamos, y que ya es proverbial, a cuya merced
el poeta pasa por la tierra como un personaje de capricho, con el
despilfarro de un desdeñoso, con la torpeza de un inocente, con la
grande y dominadora sencillez de un hombre justo.

Y asi, su labor
poetica, nacida de fuentes tan serenas, hija de todos los sentimientos
mas fundamentales del espíritu, Es casta y benigna, salobre como
campesina madrugadora, firme como labrador envejecido sobre la reja,
santa y profunda como un himno de Dios en el mas escondido rincón de
alguna selva.

   

Su obra en verso, de pareja y sobresaliente calidad, le abre,
en 1891 – con la aparición, de El Himno de los Bosques- las puertas
de la Academia de las Letras.

Despues siguen los poemarios La Noche
Rustica de Walpurguis, (1897) , Poemas Rusticos, (1902), Considerada
por muchos su obra decisiva, y que tuvo magnífica acogida y en (1905)
En el Desierto, Y luego sigue Idilio Salvaje que tuvo extraordinaria
repercusión, Incluso entre sus contradictores, los poetas modernistas.

    Caracteristico de lo mejor de su poesía, es el esplendoroso
despliegue, de sensaciones y emociones en el ambito, de la realidad
natural.

 

 

La naturaleza cantada por Othon, es siempre grandiosa, dinámica,
marcada por imponentes cataclismos, de una increible variedad de sonidos
y colores orquestados a modo de una sinfonía.