El libro denuncia de la violencia que aún continúa: Rubén Leyva
Memorial de agravios
recupera detalles del proceso
de lucha oaxaqueña en 2006
Reúne 207 imágenes de fotógrafos y una reflexión sobre el movimiento en seis ensayos
Ruinas en llamas, policías con escudos y toletes, genteque huye, heridos ensangrentados, helicópteros que circundan el cielo, barricadas en las calles. Un parte de guerra al rojo vivo, el escenario: las calles de Oaxaca. La historia se ha reunido en Memorial de agravios, documento fotográfico, complementado con seis ensayos, que recuenta el movimiento social que convulsionó a México durante 2006.
A lo largo de 207 fotografías se rememora un capítulo en la presencia nacional y llama a no permitir que quede en el olvido. “Es una denuncia de la violencia que aún continúa y que en algunos casos se ha refinado, pero en otros se ha hecho brutal”, puntualizó en entrevista Rubén Leyva, editor del volumen.
“Se trata de una serie de detalles sobre un movimiento constituido por gente con ímpetu y deseos de cambiar las cosas; de la noche a la mañana descubres que tu Oaxaca no es la misma, ahora hay carros incendiados, barricadas y manifestaciones sociopolíticas, que también tienen una razón estética”, expuso Leyva.
Para el proyecto del libro, publicado por Carteles Editores, se reunieron aproximadamente 2 mil fotografías capturadas durante los meses de las movilizaciones sociales. De ese amplio acervo se escogieron 207 tomas de 22 fotógrafos locales, nacionales e internacionales, lo que brindó diferentes puntos de vista.
Rubén Leyva comentó que el libro muestra el proceso del movimiento, que empieza desde la toma del zócalo oaxaqueño por los maestros, la caída de los laureles, el violento desalojo del zócalo, las protestas, la constitución de la Asambleas Populares de los Pueblos de Oaxaca, el enfrentamiento del 2 de noviembre y la posterior represión de la Policía Federal Preventiva. “Las fotografías son lo que se vivió, y paradójicamente, dentro de lo patético, es una belleza de libro.”
Como parte de ese discurso visual, la figura del gobernador Ulises Ruiz es protagonista: aparece en mantas, graffitis y carteles. La fachada del teatro Macedonio Alcalá se levanta imponente mientras resguarda la espalda de 10 mujeres que posan ante la cámara, cual retrato de familia al que se suman pancartas de reclamos, de entre las cuales se lee: “La sangre de nuestros compañeros caídos nos exige seguir hasta la victoria”.
Otra escena “típicamente oaxaqueña” nos presenta a un Juárez de bronce que, impávido, posa su mano firme sobre las leyes, mientras los muros roídos por el fuego culminan el marco. Los portales del zócalo, el templo de Santo Domingo, las calles coloniales adornadas por su balcones se perciben entre la multitud que se manifiesta, los vehículos en llamas y las pintas insurrectas.
Bradley Roland Will, camarógrafo estadunidense asesinado el 27 de octubre de 2006, figura como uno de los personajes de obligatoria presencia. Su nombre aparece nuevamente en el memorial dedicado a las 23 personas que perdieron la vida.
Seis ensayos de Jorge Pech Casanova, Fernando Solana Olivares, Abraham Nahón, Luis Hernández Navarro y Fernando Matamoros Ponce ofrecen una reflexión profunda sobre Oaxaca, el largo historial de insurrecciones y una lucha que se inició por demandas magisteriales y después unió los agravios de varios sectores populares.
Los ensayos se publican en español con traducciones en inglés, francés e italiano, ya que el libro será presentado en otros países, lo que irá acompañado de una muestra en amplio formato.
Memorial de agravios, “un click al movimiento” de Oaxaca en 2006, se presentará el 18 de diciembre, a las 17 horas, en el patio principal de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Oaxaca, en el Centro Histórico de esa ciudad.