Nacimiento del Archivo
Histórico Municipal
José Félix Zavala
El 14 de Noviembre de 1985 se publicó en el Diario “Noticias” de esta Ciudad de Querétaro, una conversación que sostuvimos el Profesor Eduardo Loarca Castillo y quien esto escribe, a raíz del hallazgo, en el Archivo General de Notarías del Estado, del testamento del benefactor queretano Juan Caballero y Osio.
Lo medular de esta plática se puede resumir en las palabras del Profesor Loarca cuando dice: “Nos encontramos en un estado incruento de ignorancia histórica, donde todo se sabe a medias, fraccionado, y sobre todo muy refrito. Se necesitan estudios históricos actualizados, que esclarezcan nuestros tiempos y que los interesados en nuestra historia se propongan ir al reencuentro de nuestros hombres olvidados”, y señala la necesidad de rescatar a Florencio Rosas como precursor de la educación universitaria en Querétaro, al fraile Felipe Luna, al Pbro. Félix Osores, al General Arteaga, al Obispo Antonio Monroy e Híjar, al Padre Lucio, a Epigmenio González, entre muchos otros conciudadanos destacados.
Por otro lado la primera directora del Centro Regional INAH en Querétaro, Margarita Velasco, me señalaba el 13 de agosto de 1985, que en nuestra ciudad y nuestro estado “no existe orgullo por nuestro pasado prehispánico”, afirmando que a Conín se “le ha tomado como una figura controvertida en la historia regional, debido a su actuación en la conquista y pacificación de Querétaro y que es difícil ubicarlo históricamente, ya sea como desertor de su raza o como un hombre positivo”.
Entre tanto Margarita Velasco se distingue en esos días por llevar a cabo, investigaciones arqueológicas en Ranas y Toluquilla, que nos llevarán a un reencuentro con nuestro pasado, con la aún no reconocida “cultura serrana” de origen mesoamericana o prehispánica, que nos hará ver con mayor seguridad nuestro futuro.
Posteriormente se encontrarán cientos de zonas arqueológicas en el Semidesierto, en
Se encontrarán años después con las zonas rupestres, con la minería prehispánica, con el cuerpo de una niña enterrada en una cueva y cubierta con una sábana de algodón y una antigüedad de más de 2300 Años, la razón de ser de estos estudios.
El 13 de Agosto de 1985, el historiador Enrique Florescano, en ese entonces Director General del INAH inaugura
A esta mesa asistieron antropólogos muy prominentes de los Estados Unidos de América, del Canadá, de México y Centroamérica. Beatriz Braniff manifestó que “Mesoamérica es el antecedente primario de México y si no lo entendemos no sabremos quienes somos”
Señalándome el Director General de INAH, en forma personal: “estamos en el INAH, empeñados en desconcentrar la cultura, valiéndonos de las universidades, los estados y los municipios, para que con la concurrencia de todos y sin perder las dimensiones, impulsemos las actividades de nuestra historia y que en la mesa que se está celebrando, han surgido formas críticas de gran aporte que permiten la reunión de todas las generaciones de antropólogos y se está terminando una síntesis de la historia de México en los siglo XVI, XVII y XVIII”
El Dr. Pedro Carrasco señaló a quién esto escribe que: “Sí se deja de lado al indígena, México perderá a uno de los componentes más importantes de su personalidad. Debemos estar orgullosos de nuestro pasado e incorporar a esa cultura con la nuestra, ya que su aporte es permanente y para toda la civilización humana.
El 16 de agosto de 1985 el historiador guanajuatense Antonio Pompa y Pompa, investigador de
La arqueóloga Ana Ma. Crespo se interesó seriamente en el estudio de la zona arqueológica del Pueblito principalmente en la famosa pirámide que conocemos como El Cerrito y donde un servidor describe en el libro que me editara el ITQ “El Pueblito Dos Santuarios”, el conocimiento y trato que dieron los indios y los españoles a ese sitio a través de trescientos años.
También el logro de presentar el 14 de septiembre de1986 a un grupo tradicional de Concheros, auspiciado por
Mientras por otro lado publico a través de
Para finales de 1985 el que fuera gobernador del estado, Rafael Camacho Guzmán, dentro de su proyecto de rescatar el centro de la ciudad de Querétaro, ya había restaurado las antiguas Casas Reales, en donde al principio de su administración residían las cárceles y
A este edificio histórico, por muchas razones de sobra conocidas, ya restaurado, se trasladó el Palacio de Gobierno del Estado, antes ubicado en la antigua Casa Rubio, ubicada en la esquina de Madero y Ocampo.
Mientras que por otro lado se reconstruía, en la esquina de Madero y Guerrero, en la antigua comandancia de la 17ª Zona Militar, la que seria sede de
Una vez tomado posesión del gobierno del estado, Mariano Palacios Alcocer y de
Las circunstancias de ese traslado anticiparon para el Municipio de Querétaro, lo que ya existía en la mente del Gobierno del Estado en ese entonces, a través de
Este proyecto se hace patente como tal, en Julio de 1986, difundiendo los beneficios del Sistema Nacional de Archivos que llevarían a hacer efectivos, el rescate y organización de la memoria documental regional, integrándose a él 40 archivistas del Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica y del Archivo General de
Volviendo al motivo de esta narración, la anticipación a este proyecto por parte del Municipio de Querétaro, se debió a que en algunas de las bodegas de la sede provisional de
Al ser informado el Secretario General de
Al dar comienzo, el suscrito, a la revisión de la documentación, asunto del todo difícil, debido a que se encontraba inmersa entre basura, suciedad y papelería de desecho, fui poco a poco encontrando lo que a través de los siglos había quedado del Archivo de Querétaro.
Encontrando en ese aparente “basurero” entre cientos de documentos de vital importancia para la historia regional y nacional, las Actas de Cabildo a partir de
Por aquellos días escribí un pequeño artículo en el Diario Noticias y una fotografía del primer salón que iba quedando como el lugar de rescate de este valioso archivo y que titulé “Papeles y Libros Viejos”, y donde doy conocimiento cabal de haber encontrado documentación desde el Siglo XVII al XX, donde se podrían encontrar documentación original de la división de la ciudad en cuarteles, también de los bandos, edictos, reglamentos, entre otros múltiples testimonios históricos de la vida de nuestra ciudad.
Fue para mí un encuentro con el pasado y un compromiso de salvar lo que aún quedaba de testimonio escrito en
Más adelante escribiré en el mismo diario “Noticias” cuatro pequeñas notas, dando testimonio de documentos encontrados como el testamento de
Fueron a visitar estos hallazgos el maestro José Rodolfo Anaya Larios, el Lic. Ignacio Realino Frías, José Luis Esquivel Estrada, El entonces diputado local Dr. Zúñiga, entre otros más, interesados.
No hubo observaciones que hacer por parte del Archivo General de
Quienes lo visitaron como expertos del A. G. N., dejaron constancia de ello en un documento que titularon “Los Archivos Municipales de Querétaro” en la que señalan entre otras muchas cosas que en el Archivo Municipal de Querétaro, de Cadereyta y de Jalpan, se encontraron documentación del Siglo XVII al XX; en el de Colón y en el de San Juan del Río, del XVIII al XX y en los demás, del Siglo XIX en adelante.
En ese mismo documento en la página 129 hasta la 154 describen pormenorizadamente lo encontrado como documentos históricos y administrativos en el Archivo Municipal de Querétaro.
Para el 15 de Mayo de 1986, este archivo presenté en el patio central de la sede de la presidencia municipal la exposición titulada “El Triunfo de
El 19 de Septiembre de 1986, en los inicios de
El 8 de Abril de
A este rescate y a la consolidación de los otros 17 Archivos Municipales, el Gobernador del Estado de Querétaro, Mariano Palacios Alcocer, señaló en el documento titulado “Los Archivos Municipales de Querétaro” “…que el conocimiento que puede aportar Querétaro es sumamente rico, pues es sabido que los ejes de la evolución social y económica de México fueron las viñas que partían de Querétaro, cuya historia subyace como inmenso bloque donde sólo asoman cuatro o cinco puntas espectaculares y que es sabida la depredación de sus archivos en distintas épocas en varios de los Municipios del Estado, pero que no obstante esto existe aún basta riqueza documental que se debe preservar a favor de la historia de la identidad y del país”.
Por lo que se entregaron, en forma periódica, los inventarios de la documentación seleccionada y rescatada de mi parte y que desde entonces constituye en forma fundamental esos archivos que sirven a la administración pública actual y a la interpretación veraz de la historia.