El origen de las velas, en la región zapoteca del Istmo
La Fraternidad Istmeña Oaxaqueña de Xalapa organiza su festividad anual
Diario de Xalapa
Redacción
– Entre las costumbres y tradiciones de los pobladores zapotecas del Istmo de Tehuantepec destacan por su singularidad, belleza y colorido las famosas velas.
Esta expresión denomina a las fiestas nocturnas anuales, bailes de gala que efectúan los coterráneos en ocasión de las ceremonias religiosas y de otros actos costumbristas con los que se rinde reverencia y se hace profesión de fe a los santos patronos de las ciudades, pueblos y barrios de la región.
En la organización y en el desarrollo de cada una de las velas participan todos los vecinos con entusiasmo, dedicación y empeño; todos ellos coordinados y dirigidos por un mayordomo designado previamente por un consejo de ancianos.
Entre estas celebraciones destacan las dedicadas a San Vicente, en Juchitán; San Jerónimo, en la región de Ixtepec; San José en la comunidad de Reforma de Pineda; San Juan, en Espinal, y Santo Domingo, en Tehuantepec; las no menos rumbosas son las integradas a las fiestas titulares de Ixtaltepec, Tlacotepec, Unión Hidalgo, Matías Romero, San Blas Atempa, etcétera.
La Fraternidad Istmeña-Oaxaqueña de Xalapa, conformada por istmeños radicados aquí, ha procurado preservar la tradición, por lo que el próximo 13 de marzo celebrará su vela anual con una gran fiesta con la que será coronada su reina Nidia García Ramón; los capitanes serán Daniel Ramón Rodríguez y Socorro Martínez Gómez. Complementarán el cortejo, la capitana juvenil Yolotl A. Cruz Mendoza; la infantil Emily Guadalupe Salinas Valdivia y la señora Catarina Martínez Jiménez.
– Antecedentes históricos
Sobre este tema en particular, el profesor Wilfrido Sánchez Márquez, miembro de número de la Academia Mexicana de la Educación, sección Veracruz, escribió: «Según la Enciclopedia Británica, el término vela es el nombre que se da a un cilindro de cera, sebo, parafina o de otra sustancia semejante, provisto de un pabilo que al encenderse sirve para alumbrar. El uso de las velas es muy antiguo y se cree que ya se conocían en Roma en los tiempos de la persecución de los cristianos; quizá sea éste el origen de su uso tradicional en las ceremonias de la Iglesia católica».
A la connotación anterior, el Diccionario Enciclopédico Sopena agrega las siguiente acepciones de vela: «Asistencia delante del Santísimo Sacramento, y Romería, peregrinación religiosa que por devoción se hace a un santuario».
Por su parte, la Enciclopedia Metódica Larousse connota al vocablo «velada», palabra derivada de vela, como: «Reunión nocturna de varias personas con intención de divertirse o solazarse», y como «Concurrencia nocturna a una plaza o paseo público, con motivo de una fiesta musical o literaria».
Con los elementos semánticos citados, estamos en condiciones de definir a las «velas zapotecas istmeñas» como fiestas nocturnas tradicionales en las que confluyen motivaciones religiosas y folclóricas. Estas celebraciones fueron introducidas en al región del Istmo por los frailes misioneros españoles que durante la época de la Colonia evangelizaron y castellanizaron a nuestros aborígenes. En conclusión, podemos afirmar que las «velas zapotecas» son manifestaciones del mestizaje cultural hispano-mexicano.
– Descripción
Tehuantepec fue señorío zapoteca, el último rey fue Cocijopí. Estas son las velas más famosas de Tehuantepec, en que todas las damas bailan al ritmo de La Sandunga, la más famosa canción del Istmo.
Las fiestas religioso-profano llamadas velas son en honor a un santo, una virgen o un héroe. La organización está a cargo de mayordomos con el apoyo de capitanes y capitanas, quienes voluntariamente solicitan la festividad. Las velas comprenden misas, convivio en cada del mayordomo, regada de frutas (desfile de carretas y carros alegóricos, donde las capitanas, vestidas con sus hermosos trajes regionales, tiran frutas y regalos a los concurrentes). Por las noches se ofrecen convivios y bailes populares.
Hay diferentes velas como la «Vela Sandunga» y la «Vela Tehuantepec». La primera de ellas se lleva a cabo en una noche de la última semana de mayo. La festividad incluye la coronación de la reina de la sandunga y baile popular. Por su parte, la «Vela Tehuantepec» se celebra cada 26 de diciembre, en un salón de baile, donde todas las mujeres lucen, por regla general, el típico traje de tehuana. Esta vela, como las otras, es extensiva a los istmeños radicados en otras ciudades del país. Tiene como finalidad conservar sus tradiciones y que la comunidad istmeña se concentre y conviva con sus allegados.