Descansa en paz amigo mío
Mi buen Filiberto Carrillo
Te recuerdo recorriendo las calles de mi antigua ciudad
Esa que ya no existe
Con tu alcancía en mano
Nadie imaginaba
Que de Ella saldría
Una obra monumental
El templo de Cristo Rey
Que junto con tus versos y tu oratoria
dan gloria a mi Querétaro
Yo era un árbol y hablaba
estaba cubierto de hojas y ojos
Yo era el murmullo que avanza
el enjambre de imágenes
Bautizaste como nadie lo hubiera podido hacer a mis dos retoños, diario lo recuerdo, me llevaste a la primera comunión ya hace 54 años, me cubriste con tu capa negra, larga y despojaste la imagen de San José de ese velo morado que indicaba la semana de pasión y me lo mostraste en esa su capellanía La Congregación, eras tan joven en ese entonces y nunca pensé en verte partir, te sentía eterno en esta mi ciudad
Adios Filiberto Carrillo
José Félix Zavala