Así lo dio a conocer el director de Gestión de Emergencias de Gobierno del Estado, Gerardo Quirarte Pérez.
Agregó que la ubicación de los sismógrafos será establecida por expertos científicos tanto del Centro de Geociencias de la UNAM como del Colegio de Ingenieros del Estado de Querétaro en base a los estudios, planos, atlas de riesgos entre otra información de tipo geológico que han realizado desde hace 3 años.
En rueda de prensa el funcionario estatal informó sobre los resultados obtenidos por parte de geofísicos tanto del Colegio de Ingenieros como del Centro de Geociencias de la UNAM en Peña Blanca, Extoraz y en la cabecera municipal de Peñamiller, donde desde noviembre pasado los habitantes han venido escuchando fuertes estruendos acompañados por vibraciones, de tal manera dijo, se trata del reacomodo de rocas en el subsuelo denominadas lutitas.
«Son lutitas y esto ha generado que haya ciertos pliegues y valles en el subsuelo, que son como hojas de papel encimadas, como un cuaderno y de repente se doblan, entonces por su propio peso y condiciones de agua y del suelo que hay en esa zona de repente esa estructura se colapsa, se caen y al caer producen un ruido, un estruendo y ciertas vibraciones», explicó.
Agregó que la información recabada en la zona de Peñamiller y específicamente en 3 comunidades: Peña Blanca, Extoraz y en la cabecera municipal establece que se escucha un estruendo con duración de 2 segundos aproximadamente y vibración de algunos vidrios «cuando hay sismos importantes frecuentemente se tienen fracturas, grietas, muros caídos, vidrios rotos y esto no se ha presentado en ningún domicilio, entonces esto viene a corroborar la teoría de los científicos en ese sentido, ellos estiman que no va haber situaciones más graves de las que se tienen ahorita».
Gerardo Quirarte afirmó que dada esta situación la zona del Semidesierto y Sierra Gorda se mantiene en fase amarilla, «es decir, estamos alertas pero no es una emergencia, sin embargo se atiende con toda seriedad y puntualidad». Sin embargo admitió que de algunos días a la fecha se registraron una serie de movimientos un poco más fuertes en Peñamiller lo que aceleró todo el proceso, «se mantiene en el área tanto personal de Protección Civil del Estado como de ese municipio, además de la Zona Militar, de seguridad pública, de la Policía Estatal una ambulancia y se tienen dos refugios contemplados en caso que sea necesario abrirlos uno en Extoraz y otro en la cabecera municipal».
Apuntó que este jueves personal especializado se trasladó a Peñamiller a instalar 2 sismógrafos adicionales independientemente del que fue colocado y activado en días pasados, «estamos consiguiendo más sismógrafos con algunos estados vecinos». Además dijo, el Colegio de Ingenieros instalará la próxima con un radar especial para medir profundidades debajo de las viviendas y verificar que no existan cavernas, «en ese sentido estamos relativamente tranquilos porque el peso de las viviendas y de las estructuras es muy poco en esa zona del Estado, no hay grandes edificios, pero aún así se van a realizar los estudios, se va hacer un cuadrante y muestreos para verificar que no haya ningún riesgo para la población».
Finalmente, puntualizó que en la Sierra Gorda, y concretamente en los municipios de Jalpan de Serra y Landa de Matamoros, geólogos de la UNAM tienen sismógrafos instalados desde hace 3 años, «se están haciendo lecturas, porque es una zona de microsismos, el ser humano siente un sismo a partir de 3.5 o 4 grados en la escala de Richter y hay muchos pequeños de 2 grados o de 1 que no se sienten».