El recuerdo de Federico García Lorca se traslada de Nueva York a Madrid
La Residencia de Estudiantes muestra una selección del homenaje que se ha rendido al poeta en la ciudad estadounidense
Flor Gragera de León Madrid
Federico García Lorca. / Agustín Sciammarella
La voz del actor Will Keen se clava en el estómago, mientras los versos que García Lorca escribió inspirado por una ciudad que cambió su forma de ver el arte se proyectan en dos pantallas. Unas 170 personas en una sala de la Residencia de Estudiantes de Madrid escuchan la conferencia que el granadino impartió desde 1930 a 1936 en diversos lugares para explicar Poeta en Nueva York. “Era consciente de la dificultad de la obra”, comenta Laura García Lorca, que preside la Fundación García Lorca. Keen se pasea después entre el público y pasa del inglés para recitar en castellano. Aplauso enardecido. Ya había escenificado esta charla en la Biblioteca Pública de Nueva York el 5 de junio. El homenaje a Lorca se traslada de esa ciudad a Madrid.
El autor español se encontró en Nueva York, adonde viajó en 1929, con la lógica más cruel del capitalismo. Y Poeta en Nueva York fue su grito de horror. La visita del escritor a la ciudad ha sido recordada con Lorca in NY: A Celebration, el mayor homenaje que la Gran Manzana le ha rendido. El centro ha sido la muestra Back Tomorrow: Federico García Lorca Poet in New York en la Biblioteca Pública, que reúne por primera vez el conjunto de los manuscritos para Poeta en Nueva York.
Una selección de los actos que se han organizado en EE UU llegó ayer a la Residencia de Estudiantes. Poeta en Nueva York. Federico García Lorca. Una noche en Madrid, organizado por la Fundación García Lorca, La Caixa y Acción Cultural Española, fue una velada de teatro, música y poesía. “No queríamos que terminara el festival en Nueva York sin una huella de lo que se ha hecho en Madrid”, explica Laura García Lorca.
Así, el acto de Madrid continuó con la performance Lorca, please help me!, del estadounidense John Giorno. La obra del granadino fue esencial para este escritor, según Laura García Lorca. Cuando estudiaba en la Universidad de Columbia, descubrió que el poeta se había alojado en “el cuarto de enfrente” de una de las residencias. Lorca pasó nueve meses en Nueva York y, luego, tres en La Habana.
La celebración continuó con la lectura de poemas por parte de Javier Godino, Óscar Velado, el mismo Keen, María Fernández Ache, Fernanda Orazi y Pablo España. Y el Dany Noel trío ofreció una versión de Son de negros en Cuba, el último poema de Poeta en Nueva York y que Lorca escribió ya en La Habana. “De repente, aparece un poco de luz en una obra con mucha oscuridad”, comenta Laura García Lorca. “Por eso quisimos cerrar así”. Y esperan llevar actos similares a México, Miami y, por supuesto, Granada.