Verónica Corona

El País

La voz de las escritoras mexicanas llegó este viernes a la inauguración de la Feria Internacional del Libro del Zócalo en Ciudad de México. Con pañuelos rosas, una veintena de autoras subieron al principal escenario de la cita literaria para hacer dos demandas claras: el fin de la violencia machista en el ámbito cultural y una mayor inclusión de las mujeres en los programas de los encuentros de escritores. En conjunto han leído un pronunciamiento en el que han asegurado que el movimiento feminista “no es una moda, es una exigencia”.

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El grupo ha conformado la colectiva ‘Mujeres juntas marabunta’ desde marzo. Entonces, algunas autoras habían contado, a través de las redes sociales, haber sido víctimas de acoso sexual o violencia por parte de sus colegas escritores. Las denuncias destaparon un mar de señalamientos que mostraron, además, las desventajas que las escritoras han padecido durante años en su avance profesional respecto a sus pares masculinos. Un asunto que la industria literaria se ha demorado en atender.

“Exigimos no más violencia machista, ni pactos de silencio; exigimos perspectiva de género en el ámbito literario; exigimos que nuestro trabajo sea leído, conocido y considerado en igualdad de condiciones”, han dicho las autoras en su pronunciamiento. Los organizadores de la FIL Zócalo han cedido parte del tiempo de la apertura de la feria para que las escritoras expusieran sus argumentos. “Si tenemos privilegios, abriremos espacios a las que vienen y a las que están”, han prometido. “Estamos creando una contranarrativa que reescriba el futuro”, añadieron.

Esta no es la primera vez que personalidades del mundo literario se pronuncian sobre la escasa presencia femenina en los foros de la industria. En mayo, otros grupo de escritores iberoamericanos firmó una carta en la que criticaban la escasa presencia femenina en la Bienal de Novela Mario Vargas Llosa que se celebró en Guadalajara (México). Entonces en un cartel de 16 panelistas solo había tres mujeres. La denuncia no influyó en la organización de la bienal, pero en las entrañas de la industria editorial ha comenzado un murmullo que los organizadores de estas citas están tomando en cuenta.

El secretario de Cultura de Ciudad de México, José Alfonso Suárez, ha asegurado que para la FIL Zócalo se ha conseguido que de 380 autores invitados, unas 176 sean escritoras (46%). “Nos comprometemos a que la participación en los actos culturales sea del 50-50, como debe de ser. Que no quede en marchas o en falsas medidas de paridad”, ha dicho en respuesta al pronunciamiento de la colectiva. El programa de la feria, además incluye homenajes a las escritoras Fernanda Melchor y Martha Riva Palacio, así como actos póstumos en honor a Elena Garro. “Es complicado decir algo a las alturas de las exigencias, porque es cierto que como país tenemos una gran deuda con la mitad de la población”, ha reconocido Eduardo Villegas, coordinador de Memoria Histórica y Cultural de México, tras la manifestación de las autoras.