Pinturas de Demián Flores/Casa Lamm
En La Casa Lamm se exhibe desde este 28 de octubre la exposición titulada «Estandartes, lienzos para la memoria», del artista Demián Flores.
Por Isabel Leñero
(proceso.com.mx).–
En La Casa Lamm se exhibe desde este 28 de octubre la exposición titulada Estandartes, lienzos para la memoria, del artista Demián Flores (Oaxaca, 1964).
Son 25 estandartes que, en palabras del pintor, representan un homenaje a la pintura popular de su estado. Su intención es crear una comunicación con los estandartes de la cultura zapoteca. Es por ello que Flores habla de homenaje, pues es un diálogo desde su propio lenguaje. Un homenaje a los pintores populares anónimos y otros reconocidos maestros como Cándido Carrasco, Pedro Pedrada o Mariano Toledo.
Lo valioso e interesante de esta propuesta es entablar comunicación a través del mismo lenguaje. No es una reinterpretación ni una intervención, es un diálogo con una manifestación cultural viva. Su motivo es crear estos puentes ante la fascinación que siempre ha tenido por ellos y han estado presentes en su vida.
Tienen un valor simbólico y devocional, pues se utilizan como ofrecimiento de las mayordomías a su patrono, parroquia o capilla en agradecimiento por los favores recibidos.
Flores ha dicho: “Esta serie equilibra dos momentos en el lenguaje pictórico: los estandartes pintados como manifestación popular en Juchitán y la pintura como práctica artística contemporánea. En esta serie las formas se fragmentan en líneas y manchas que se desfasan creando planos traslapados».
Las 25 piezas, que tienen diferentes formatos, fueron realizadas por el pintor durante el confinamiento por el covid-19 y están pintadas en acrílico. Sobresale la paleta llena de colores, podríamos hablar de una reflexión introspectiva del artista sobre la necesidad de “mirarnos como una parte del universo y no como el centro”.
El interés y la investigación por los estandartes lleva ya muchos años en el imaginario creativo del artista. Así como la colección que ha ido formando. Es por lo tanto una propuesta más compleja de lo que parece, pues la investigación que Flores ha realizado en esta primera serie aborda los valores simbólicos de cada representación, así como los valores pictóricos de una representación pictórica autodidacta donde resalta la potencia religiosa ritual de la imagen.
Vale la pena anotar lo que Víctor Cata, escritor y lingüista juchiteco, ha escrito sobre los estandartes: “Revelan tres conceptos: la mano, el lenguaje y la cultura. La conjunción de esta triada nos muestra dos realidades, una de agradecimiento a la divinidad por la vida rescatada y la otra, la mano sensible del artista”.
El resultado, lleno de vitalidad y creatividad, desborda el entusiasmo y admiración por la práctica, y no sólo la rescata sino que abre un camino en el trabajo del artista.
La muestra podrá visitarse a través de Facebook, pero también presencialmente mediante cita.