Continúa la tendencia al alza en la transmisión del virus en el país
José Luis Alomía, director general de Epidemiología, reiteró que “continúa la tendencia ascendente detectada desde las semanas 39 y 40”, pues ayer se confirmó incremento de 12 por ciento en los casos reportados entre la semana epidemiológica 46 (8 al 14 noviembre) y la 47 (del 15 al 21 de noviembre).
Andrés Lajous, secretario de Movilidad de la Ciudad de México, reconoció que a partir de la nueva normalidad se incrementó en la capital del país la cantidad de pasajeros en el transporte público y automovilistas. Aseguró que “nos estamos acercando, en las semanas recientes, a una reducción de sólo 15 por ciento en el tránsito de vehículos”.
En conferencia vespertina en Palacio Nacional indicó que el Gobierno de la Ciudad de México analiza la posibilidad de emplear en el transporte público el código QR para detectar posibles casos de Covid-19 y alertar a los pasajeros que pudieran haber estado expuestos a un contagio.
Lojous destacó que si se siguen medidas básicas de protección, como portar cubrebocas, guardar silencio, mantener abiertas las ventanas del transporte y usar gel antibacterial antes y después del traslado, “se puede tener un viaje relativamente de bajo riesgo”. Agregó que para mantener una alta afluencia de autobuses y microbuses en la ciudad se invirtieron 355 millones de pesos como subsidio al transporte concesionado.
En cuanto a la adquisición de vacunas, Alomía resaltó que México suscribió acuerdos con tres empresas y con la plataforma Covax de Naciones Unidas, mediante marcos que señalan cantidades mínimas y máximas para la adquisición.
Lo anterior, dijo, permite al país, “a partir de su logística de vacunación y grupos objetivos y de la mayor facilidad logística para su aplicación, decidir totales finales, por lo que podemos esperar movimientos en la cantidad (de dosis adquiridas) en función de su utilidad y facilidad logística para aplicación”.
Otro factor central será su disponibilidad, explicó, “pues si una llega primero y está demostrada su eficacia y seguridad para ser distribuida y aplicada, lógicamente va a tener que optarse por los rangos más altos, es decir, obtener la mayor cantidad de vacunas posible de la que estaría disponible para su aplicación.”