Ranas y Toluquilla, zonas arqueológicas
Hablar de las zonas arqueológicas de Ranas Toluquilla es referirnos por un lado a los serranos, habitantes inmemoriales de esta región de tiempos y segundo a una gran ciudad religiosa de esta civilización minera. Toluquilla, una de las ciudades más importantes de le región serrana, ubicada en la cima del cerro del Jorobadillo, de donde toma su nombre
En 1872 Bartolomé Ballesteros visitando las minas de Maconí en la Sierra Gorda nos dice que había una gran cantidad de ruinas en las partes altas de los cerros, nos sigue contando que “se trata de un asentamiento humano en la planicie de un cerro con frente al cerro de San Nicolás”.
En 1872 la Escuela de Mineralogía nos dice de este lugar:
“…su parte superior está terminada por una meseta espaciosa donde se ven las ruinas de una serie de baluartes y fortificaciones colocadas con una habilidad admirable que revela la inteligencia de sus autores”
“Se podían contar 53 construcciones y se elaboró un plano y que estos sitios se construyeron de acuerdo a una planeación para edificar la ciudad en la parte alta de un cerro.”
Las investigaciones de los últimos años sobre los asentamientos prehispánicos de Ranas y Toluquilla, localizados al sur de la Sierra Gorda de Querétaro, han permitido precisar datos sobre la cronología y traza urbana de estos sitios, así como sobre la manera en que subsistieron sus habitantes.
Las zonas arqueológicas de Ranas y Toluquilla, está situadas al norte del estado de Querétaro y al sur de la Sierra Gorda, se encuentran en un ambiente boscoso, en un nicho ecológico que va del noroeste al sureste de la sierra. Este nicho cuenta con grandes elevaciones de más de 3 000 msnm que sirven de barrera o parteaguas para los vientos que vienen del Golfo de México, lo cual hace que predomine la neblina y el desarrollo de bosques de coníferas y encinares.
Este ambiente se encuentra rodeado al oriente, poniente y sur por lomas bajas que experimentan el efecto de sombra de lluvia, ya que el agua cae en las altas montañas, de forma que llueve poco y se genera un sistema de semi desierto, con vegetación de cactáceas y matorrales bajos espinosos.
La mayor parte de la sierra está compuesta por rocas calizas con fallas geológicas que permiten la acumulación de minerales como mercurio, plomo, zinc, plata, oro y pequeñas cantidades de cobre y arsénico. En la época prehispánica se aprovecharon los óxidos de hierro, que se presentan como tierra roja, conocida como almagre, y el sulfuro rojo de mercurio, conocido localmente como granate o cinabrio. Estos productos, usados como pigmentos en la antigüedad, se localizaron en las minas de explotación subterránea y de cielo abierto.
Historia
La Sierra Gorda se localiza al norte del estado de Querétaro y forma parte de la cordillera de la Sierra Madre Oriental que corre paralela a todo el Golfo de México. Esta gran área abarca parte de los estados de Hidalgo, San Luis Potosí, Guanajuato y Querétaro, y en este último, los municipios de Arroyo Seco, Pinal de Amoles, Jalpan de Serra, Landa de Matamoros, San Joaquín y Peñamiller.
Estudios recientes indican una antigüedad de entre 6000 y 4000 años para las ocupaciones humanas más tempranas del sur de la zona. La Sierra Gorda fue una zona de intenso tráfico comercial y cultural hacia las costas del Golfo, la Huasteca y la mesa central de México principalmente, aunque se han encontrado vestigios que dan cuenta del intercambio comercial con las regiones de Río Verde (San Luis Potosí), Teotihuacan, Tula y el Occidente de México, la zona del Bajío, los valles de Querétaro y San Juan del Río.
Mediante el análisis de los rasgos pictóricos encontrados en la zona, queda claro que grupos nómadas de cazadores-recolectores y grupos sedentarios que dependían total o parcialmente de la agricultura estuvieron en frecuente intercambio cultural.
Los contactos entre la población serrana y las culturas vecinas fueron heterogéneos, al igual que los rasgos locales, la identidad política y el aprovechamiento de los recursos minerales. Para el periodo comprendido entre 200 y 1000 d.C., la Sierra Gorda se ha clasificado en tres subregiones: Río Verde, cultura serrana y Huasteca, en las que habitaban grupos con identidades culturales propias.
La región de Río Verde se encuentra al noroeste del estado de Querétaro y sus asentamientos se establecen en la cota de los 1200 msnm. En la región de cultura serrana se localizan los asentamientos de Ranas y Toluquilla, los que, ubicados en las partes altas de las montañas, dominaban los pasos naturales y controlaban los recursos minerales y la circulación de bienes. La región Huasteca abarca la zona noreste del estado y entre sus asentamientos destacan Tancoyol, La Campana, Tancama y Tonatico, que controlaban las tierras fértiles en los fondos de los valles y las laderas medias.
A la llegada de los españoles, las tierras serranas eran habitadas por grupos de jonaces, huastecos, ximpeces y pames. De éstos, los jonaces destacaban por su ferocidad y fueron quienes participaron en la polémica Guerra de la Media Luna, en 1749, que representa el fin de los intentos de pacificación de la zona chichimeca. Al parecer, esta famosa guerra se mitificó. Era de dominio común que en el cerro llamado La Media Luna, situado por la carretera a Jalpan, en la zona del semi desierto, hubo una “última batalla” entre los grupos chichimecas con los españoles y sus aliados nativos. Se decía que cuando vieron perdida la batalla, familias enteras de chichimecas se aventaban desde lo alto de las paredes de roca que sobresalen, en un intento de suicidio colectivo, destacando así su integridad cultural.
Los pames (o xi’oi como se autodenominan) formaban el grupo más extendido y eran de carácter pacífico y afectos al trabajo y al comercio con los españoles. Fueron quienes se congregaron en mayor número en torno a las misiones y con ellos trabajaron los franciscanos durante más tiempo. En la actualidad se encuentran grupos pames en el municipio de Jalpan y en la delegación de Tancoyol, principalmente en la comunidad de Las Nuevas Flores.
CRONOLOGÍA
Época prehispánica
Primeros pobladores. En Cadereyta, al sur de la sierra, en el paraje Mesa de León, se han encontrado puntas de proyectil de los tipos Tilapa y Coxcatlán, que indican una presencia humana de entre 6000 y 4000 años de antigüedad. Clásico (200-900 d.C.). La zona es habitada por los “serranos”, que extraían cinabrio para comerciarlo con Teotihuacan.
800 d.C. Hacia esta fecha arriban a la región los otomíes, los cuales conviven pacíficamente con los grupos que ya la habitaban.
Posclásico (900-1521 D.C. La desecación progresiva de la zona impide el desarrollo de la agricultura. Ranas, Toluquilla, Quirambal y El Soyatal son abandonados.
Época colonial
1527. Nuño de Guzmán conquista el señorío de Oxitipa, al que pertenecían Jalpan, Xilitla, Tancoyol y Tilaco.
1550. Comienza la actividad misionera en la Sierra Gorda con la fundación de una misión agustina en Xilitla, San Luis Potosí.
1554. Comienza la guerra con los chichimecas, considerados un peligro para la libre circulación hacia los reales de minas, como el de Zacatecas.
1676-1677. Los agustinos trabajan en las misiones de Jalpan, Concá y Barranca de acuerdo con los franciscanos.
1682-1683. Desde la misión de Maconí, cabecera de la Sierra Gorda, el capitán Jerónimo de Labra avanza hacia el paraje de Las Ranas y funda las misiones de San Nicolás de Tolentino, Nuestra Señora de Guadalupe de Deconí, San Juan Tetla, San Francisco Tolimán, La Nopaleda, Santiago del Palmar y San José del Llano. Luego de la muerte de De Labra, las misiones quedan sin protección.
1700. Hacia esta fecha, dominicos y agustinos abandonan las misiones y éstas quedan en manos de los franciscanos que años atrás predicaban en Tolimán, Cadereyta, Escanela y Maconí.
1740. Los franciscanos fundan su primera misión en San José de Vizarrón.
1744. El 20 de abril, fray Pedro Pérez de Mezquía funda la misión franciscana de Santiago de Jalpan.
1750. Fray Junípero Serra llega a la misión de Jalpan.
1751-1762. Se construyen las misiones de Santa María del Agua de Landa, San Miguel Concá, San Francisco del Valle de Tilaco y Nuestra Señora de la Luz de Tancoyol.
1784. Muere fray Junípero Serra, a los 70 años de edad, después de 34 años de labor misionera, 11 de los cuales los dedicó a la noble y formidable tarea de lograr, en compañía de fray Francisco Palou, la integración espiritual, cultural, social y productiva de los indígenas de la región. Hoy el municipio de Jalpan de Serra lleva este nombre en honor del misionero.
Siglo XIX
1810. El movimiento revolucionario influye fuertemente en la zona serrana y hay varios levantamientos armados.
1819. La población de Jalpan queda en ruinas después de haber sido quemada y saqueada por el ejército realista.
1857. Desde Jalpan, el general Tomás Mejía emprende continuas acciones militares contra el Partido Liberal, que gobernaba el estado de Querétaro y la República, hasta lograr la toma de la plaza de Querétaro.
1880. La construcción de un camino de terracería que comunicaba con la capital del estado representa un fuerte impulso al desarrollo económico de la región.
Siglo XX
1904. El gobernador del estado, Francisco González de Cosío, otorga a la Villa de Jalpan la categoría de ciudad, que ya contaba con servicio telefónico (de baterías), energía eléctrica a base de carburo, telégrafo, así como con molienda de caña de azúcar.
1911. Se crea en Jalpan el Grupo Revolucionario Aquiles Serdán, al mando del señor Policarpo Olvera, que se pone a las órdenes de don Francisco I. Madero.
1962-1970. Gracias a gestiones de Manuel González de Cosío, gobernador de Querétaro, se construye la carretera Querétaro-Jalpan. También se construyen caminos y puentes, y se introducen servicios de energía eléctrica y agua potable.
2003. La Unesco declara Patrimonio Cultural de la Humanidad a las misiones franciscanas de la Sierra Gorda de Querétaro.
La misión de San Francisco Tolimán fue fundada en 1683.
La Presa Jalpan es de importancia mundial por ser hábitat de aves acuáticas.
Bosque de coníferas, donde abundan los cipreses, ocotes, pinos y sabinas.
Entre los numerosos ríos destacan los de Jalpan, Ayutla, Santa María y Extórax.
Cómo llegar:
A la Sierra Gorda queretana se puede acceder por la autopista federal núm. 120 San Juan del Río-Xilitla, la cual se toma, si viene por la autopista México-Querétaro, a la altura de San Juan del Río.
Desde la ciudad de México, en la Terminal del Norte, salen tres corridas de autobuses hacia Xilitla, que pasan por las diversas poblaciones de la sierra. Asimismo, en la Terminal de Autobuses de Querétaro hay varias corridas a lo largo del día a varias localidades serranas y dos corridas en servicio de primera a Jalpan de Serra.
Jalpan es conocida popularmente como el “corazón de la Sierra Gorda”, metáfora que tiene sus referentes reales; cuenta con todos los servicios de una pequeña ciudad mexicana: dos bancos, variedad de alojamiento, un museo y un centro histórico cuidado y arreglado, que hacen la estancia agradable y segura, además de que todos los fines de semana se realizan presentaciones artísticas en el kiosco del jardín principal.
Del vecino estado de San Luis Potosí se llega por la carretera interestatal núm. 57, que une el municipio de Arroyo Seco con la población potosina de Río Verde, que cuenta con servicio de autobús a Jalpan en varios horarios. De la capital potosina hay dos corridas a Jalpan de Serra.
Ranas
El sitio arqueológico de Ranas se localiza en el suroeste de la Sierra Gorda. Se llega al sitio por la carretera federal núm. 120 san Juan del Río-Xilitla; pasando la población de Vizarrón, siete kilómetros adelante se encuentra San Joaquín y posteriormente la zona arqueológica. El sitio se encuentra 154 km al noroeste de la ciudad de Querétaro.
Habitada entre los siglos VII y XI, Ranas fue una de las ciudades con mayor desarrollo cultural entre los pueblos de la región debido al intenso intercambio comercial que establecía tanto hacia la costa del Golfo de México como hacia el Altiplano. La explotación minera de cinabrio (pigmento de color rojizo de gran demanda entre los pueblos mesoamericanos) era una de las actividades económicas principales, junto con la agricultura de temporal.
Las características de sus construcciones indican la existencia de una sociedad estratificada. Los habitantes usaban materiales de la región y mezclaban piedra laja y lodo; los pisos los hacían con tierra apisonada o revestimiento de estuco. El ordenamiento urbano refleja un importante aprovechamiento del irregular terreno de la sierra. Ranas fue invadida por los pueblos chichimecas del norte, principalmente jonaces, y cuando los españoles llegaron a la región estaba deshabitada.
Toluquilla: Una Gran Ciudad.
El sitio arqueológico se localiza 110 km al noroeste de San Juan del Río. Se llega por la carretera estatal núm. 120 san Juan del Río-Xilitla, hasta llegar a Vizarrón; 7 km adelante se encuentra San Joaquín y a 27 km, rumbo a Maconí, se toma la desviación a la ranchería La Esperanza, hasta encontrar la brecha que conduce a la zona arqueológica.
Toluquilla (“cerro del Jorobadillo”) se encuentra en la meseta del cerro del cual toma su nombre. Al llegar los españoles se encontraba deshabitada, al igual que su contemporánea Ranas. Toluquilla era menor que ésta y alcanzó su auge alrededor del siglo ix. Desde tiempo atrás, estableció importantes lazos comerciales con Teotihuacan, Tula y la Huasteca, y, junto con Ranas, controlaba el comercio de mercurio y cinabrio.
Toluquilla comparte muchas características constructivas con otras ciudades de la Sierra Gorda, principalmente con Ranas. Era común el uso de piedra laja, arcilla y estuco, y había un aprovechamiento eficiente de los espacios mediante rellenos y ampliaciones que permitían nivelar el terreno adecuándolo a las necesidades de crecimiento. Con una organización social estratificada, la decadencia de Toluquilla tuvo lugar entre los siglos x y xi, como parte del fenómeno de desajustes sociales de toda la zona. Horario: lunes a domingo, 9:00 a 17:00 hrs. Servicios: custodios.