Por su parte, el historiador Carlos Amador Galicia señala que es posible hacer cierres parciales o volver peatonal el centro solo si hay voluntad política, recursos suficientes y un equipo de expertos que conozcan la ciudad y también la quieran.

Las propuestas que surjan en este tema adquieren valor si son planteadas por arquitectos, ingenieros civiles y especialistas en movilidad conocedores de la historia, desarrollo y necesidades reales de esta ciudad.

Hugo Gutiérrez Martínez, ambientalista y usuario de bicicleta, sostiene que lo que sí se debe hacer es desincentivar el uso del automóvil en este cuadro de la ciudad.

María Karina Ronzón, quien también utiliza bicicleta como medio de transporte, dice estar a favor de la peatonalización de algunas calles, el fomento del uso de la bicicleta y que se creen programas para reducir movilidad en autos particulares.

Expone que en algunos países europeos los gobiernos incentivan con bonos a los trabajadores que emplean bicicletas para moverse a sus centros laborales: “Las prácticas con buenos resultados, comprobados, nos deben servir como ejemplo. Se tendría que ir por la infraestructura”.

“Cerrar el centro a los vehículos es algo que se ha venido hablando en foros y no es un tema sencillo”, expresa por otra parte el profesor Avelino Rangel Peña. Enfatiza que una consulta ciudadana sobre este tema es obsoleta y siempre generará polémica.