Luis Tovar
Tomada de la solapa del más reciente libro de Jorge Ayala Blanco, publicado a finales de 2021 y del cual se dio noticia en este mismo espacio, la siguiente cita es tan larga como pertinente pero, sobre todo, admirable:
“Jorge Ayala Blanco, Reconocimiento al Mérito Universitario 2021 por 50 años de vida académica en la UNAM y Premio Universidad Nacional 2006 en Docencia en Artes, ha sido desde 1963 crítico titular hebdomadario en las secciones culturales de Novedades, Siempre!, Excélsior, La Jornada, El Nacional, El Financiero, La Digna Metáfora, y aún hoy en el suplemento Confabulario del diario El Universal, además de colaborar en diversas publicaciones mexicanas y extranjeras. […] Ha sido corresponsal en festivales como Berlín, Río de Janeiro, Viña del Mar, Cartagena, Lodz, Huelva, Morelia, Lima, Buenos Aires, fungiendo como jurado en varios de ellos. Es miembro del Sistema Nacional de Investigadores desde 1988 hasta la fecha. Decano académico de la Escuela Nacional de Artes Cinematográficas (antes CUEC), donde es profesor de tiempo completo, desde 1964 ha impartido las materias de Historia y Análisis del Lenguaje Cinematográfico, Análisis de Estilos Cinematográficos y Análisis del Documental Contemporáneo, y fue miembro del Comité Editorial de la revista Estudios Cinematográficos entre 1994 y 2009.”
De lo siguiente también se ha hablado aquí cada vez que de las prensas sale un nuevo título del maestro Ayala Blanco:
“Es autor, entre otros, de la serie de libros conocida como el ‘Abecedario del cine mexicano’ […] y de la serie de libros sobre cine extranjero que incluye Falaces fenómenos fílmicos (1981), A salto de imágenes (1988), El cine, juego de estructuras (2002), y los volúmenes El cine actual, desafío y pasión / palabras clave / verbos nucleares / estallidos genéricos / confines temáticos / delirios narrativos (2003-2018). En 2011 recibió la medalla Salvador Toscano al Mérito Cinematográfico que otorgan la Cineteca Nacional, la Fundación Carmen Toscano y la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas; el premio a la trayectoria en investigación histórica José C. Valadés, y la Medalla de la Filmoteca de la UNAM 2011, en reconocimiento a la investigación Cartelera cinematográfica 1912-1989. En 2015 recibió el premio Fénix otorgado por la Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica (Fipresci), en 2016 el Premio Joaquín Rodríguez de la Red Mexicana de Periodistas Cinematográficos, y en 2018 el Premio Nacional de Periodismo Cultural René Avilés Fabila.”
Por las puras ganas
Así se lee, sin exhaustividad sino en apretado resumen, la trayectoria profesional de Jorge Ayala Blanco, maestro indiscutible de la crítica cinematográfica no sólo en México sino, como se ha insistido aquí, de todo el mundo de habla hispana como mínimo; para volver a decirlo sólo hacen falta las puras ganas, pero esta vez hay un motivo extra: el pasado martes 25 de enero, el maestro Ayala Blanco cumplió sus primeras ocho décadas de vida. A propósito de aniversarios, este mismo año está alcanzando nada menos que cincuenta y nueve de ejercer la crítica cinematográfica, así como cincuenta y ocho de catedrático universitario. Aun siendo admirables por cuanto hablan de constancia y profesionalismo absolutos, las cifras palidecen ante su otro significado, éste cualitativo: la docencia, investigación, crítica y análisis cinematográficos son unos antes y otros después de Ayala Blanco, y a este juntapalabras viene valiéndole sorbete la opinión en contra que algún desavisado pueda tener; peor para quien, ya sea por prejuicio, desidia o pereza pura, esté perdiéndose el trabajo más valioso con el que puede contarse en la materia, como mínimo en las últimas seis décadas.
Sí, este es un elogio, cuidadosamente desmedido, que surge de la noción venturosa de cohabitar un tiempo y un espacio con un autor insustituible. Así pues, feliz cumpleaños, maestro Ayala Blanco.