Después de su estreno en salas comerciales el pasado 12 de mayo, el documental Te nombré en el silencio, de José María Espinosa de los Monteros, será exhibido en el Cinematógrafo del Museo Universitario del Chopo, del primero al 5 de junio con una función por día.
El Cinematógrafo del Chopo abrirá sus salas en junio para acercar al público a esta estremecedora, conmovedora y esperanzadora cinta, primer largometraje de Espinosa de los Monteros, que aborda la dura situación de mujeres que han perdido a sus seres queridos y cuya situación ha sido ignorada por las instituciones gubernamentales.
Nuevas producciones
El documental, proyectado recientemente en el Centro Cultural Universitario, es parte del Ciclo Permanente de Cineastas Mexicanos Contemporáneos, iniciativa realizada por la Filmoteca de la UNAM para apoyar a las nuevas producciones nacionales.
El documental es una celebración alegre de la lucha, un espacio donde hay drama, humor y al mismo tiempo funge como un llamado de combate para exigir justicia ante la dolorosa búsqueda de desaparecidos en México.
Filmada en Sinaloa, esta película es un acompañamiento a Mirna Nereida Medina en la continua búsqueda de su hijo, Roberto Corrales, quien desapareció en 2014. Ante la nula ayuda recibida, Mirna junto con otras madres formaron Las Rastreadoras de El Fuerte, un grupo autónomo de mujeres que sale a buscar a sus hijos, o a lo que ellas llaman sus tesoros
, en el desierto apoyándose únicamente con picos y palas.
Ganadora del premio José Rovirosa a mejor documental mexicano de 2021, galardón que otorga la Dirección General de Actividades Cinematográficas y la Escuela Nacional de Artes Cinematográficas. El filme brinda un íntimo retrato sobre los horrores que viven día a día estas madres que indagan sobre el paradero de sus seres queridos, pero al mismo tiempo la hermandad que existe entre ellas, la esperanza y el amor, incluso en los momentos más oscuros. Una mirada que describe e ilustra al espectador cómo es combatir contra la indiferencia de la policía, las amenazas del crimen organizado y la indolencia de una sociedad que ha normalizado la violencia en todos sus niveles.
Durante el rodaje vivimos en carne propia los riesgos que corren Las Rastreadoras cada semana cuando salen a buscar a sus hijos. Pero también se ríen y tienen amores, y ahí radica la importancia de la dualidad de las cosas, que existe luz y sombra en ellas
, explicó el realizador.
Te nombré en el silencio fue producida en colaboración con EMT Films y Cinema del Norte junto con No Ficción y Estudios Churubusco. Además contó con el apoyo de fundaciones internacionales, como Ford Foundation, Just Films, Open Society Foundations y El Día Después.