Madrid.
Un equipo de arqueólogos descubrió los restos de una ciudad de la era del Imperio Mittani de 3 mil 400 años de antigüedad que alguna vez estuvo ubicada en el río Tigris.
El asentamiento surgió de las aguas del embalse de Mosul a principios de este año, cuando los niveles del agua cayeron rápidamente debido a la sequía extrema en Irak.
La extensa ciudad con un palacio y varios edificios grandes podría ser la antigua Zakhiku, que se cree que fue un centro importante en el Imperio Mittani (cerca de 1550-1350 aC), que controlaba gran parte del norte de Mesopotamia y Siria.
Irak es una de las naciones del mundo más afectadas por el cambio climático. El sur del país sufre una sequía extrema desde hace meses. Para evitar que los cultivos se sequen, se han extraído grandes cantidades de agua del embalse de Mosul, el almacenamiento de agua más importante de Irak, desde diciembre. Esto llevó a la reaparición de una ciudad de la Edad del Bronce que había estado sumergida hace décadas sin investigaciones arqueológicas previas. Está ubicada en Kemune en la región de Kurdistán de Irak.
Investigación a contrarreloj
Este suceso puso a los arqueólogos bajo una presión repentina para excavar y documentar partes de esta importante urbe lo más rápido posible antes de que volviera a sumergirse.
El arqueólogo kurdo Hasan Ahmed Qasim, presidente de la Organización de Arqueología de Kurdistán, y sus pares alemanes Ivana Puljiz y Peter Pfälzner decidieron espontáneamente emprender excavaciones de rescate conjuntas en Kemune en enero y febrero de 2022 en colaboración con la Dirección de Antigüedades y Patrimonio en Duhok (región del Kurdistán de Irak).
En cuestión de días se formó un equipo para las excavaciones de rescate. La financiación del trabajo se obtuvo a corto plazo de la Fundación Fritz Thyssen por conducto de la Universidad de Friburgo. El equipo arqueológico germano-kurdo estaba bajo una inmensa presión de tiempo porque no estaba claro cuándo volvería a subir el agua del embalse.
En poco tiempo, los investigadores lograron mapear en gran medida la ciudad. Además de un palacio, que ya había sido documentado en 2018, se descubrieron varios otros edificios grandes: una fortificación masiva con muros y torres, un edificio de almacenamiento monumental de varios pisos y un complejo industrial.
El enorme edificio es de particular importancia porque en él se deben haber almacenado enormes cantidades de mercancías, probablemente traídas de toda la región
, dice en un comunicado Ivana Puljiz. Hasan Qasim concluye: Fue un centro importante en el Imperio Mittani
.
El equipo de investigación quedó atónito por el buen estado de conservación de las paredes, a veces con una altura de varios metros, a pesar de que las paredes están hechas de ladrillos de barro secados al sol y estuvieron bajo el agua. Su buena conservación se debe a que la ciudad fue destruida por un terremoto alrededor del año 1350 aC, durante el cual las partes superiores de las murallas se derrumbaron y enterraron los edificios.
De particular interés es el descubrimiento de cinco vasijas de cerámica que contenían un archivo de más de 100 tablillas cuneiformes. Datan del periodo asirio medio, poco después de que el terremoto azotara la ciudad. Algunas tablillas de arcilla, que pueden ser cartas, aún se encuentran en sus sobres, también de arcilla. Los investigadores esperan que este hallazgo proporcione información importante sobre el final de la ciudad del periodo Mittani y el comienzo del dominio asirio en la región.