¿Quién es la Virgen de Fátima? Historia, aparición y dónde está
La Virgen de Fátima, también llamada Nuestra Señora del Rosario de Fátima es una advocación de la Virgen María. Surge de las apariciones de Nuestra Señora a tres pastorcillos en 1917 en Portugal.
Estos hechos y los mensajes de conversión que María les dio a Lucía, Jacinta y Francisco han llegado hasta nuestros días.
Historia y origen
El año 1917 fue especial. Europa estaba en guerra. El domingo 13 de mayo, en un pueblo escondido de la Serra do Aire en el centro de Portugal. Tres niños, Lucia dos Santos y sus hermanos Francisco y Jacinta Marto, estaban jugando mientras cuidaban de un rebaño, en un terreno del padre de Lucia.
Hacia el mediodía, después de asistir a misa como de costumbre, ven dos fenómenos luminosos, como dos relámpagos y luego una hermosa Señora más resplandeciente que el sol
– «¿De dónde sois, Señora?»
– «Soy del Cielo».
Así empezó la primera conversación entre la Virgen y Lucia.
Esta, fue la primera aparición de la Virgen de Fátima
Aparición de la Virgen de Fátima
Esa fue la primera de las seis apariciones que tendrán los tres pastores hasta octubre: siempre en día 13, excepto en el mes de agosto, cuando del 13 al 15 son retenidos por autoridades del pueblo. Igualmente, la Virgen de Fátima aparecerá ante los tres niños el día 19.
En octubre de 1930, el obispo de Leiria declara las visiones dignas de fe, autorizando el culto a Nuestra Señora de Fátima.
En todas sus apariciones la Virgen hizo un especial énfasis sobre el rezo del Rosario, y les pidió a los niños que cuando lo rezaran, después de cada misterio dijeran:
‘‘Oh Jesús perdónanos por nuestros pecados,
líbranos del fuego infierno y lleva al cielo a todas las almas,
especialmente las más necesitadas de tu Divina Misericordia’’.
La Virgen también pidió la construcción de una capilla en el lugar de los hechos, hoy el Santuario de Nuestra Señora del Rosario de Fátima.
Los 3 pastorcillos informaron que la Virgen también les había hablado de la muerte prematura de los dos pequeños hermanos, agregó que Lucía permanecería en la Tierra durante mucho tiempo. Y así fue. Francisco y Jacinta, murieron entre el año 1919 y 1920 de gripe. Lucía ingresó en el orden de las Hermanas de Santa Dorotea en 1925 y en 1948 pasó entre las Carmelitas del convento de Coimbra, donde permaneció hasta su muerte en 2005.
El Milagro al Sol anunciado por la Virgen
Eran miles de peregrinos que comenzaron a llegar a Fátima apenas se extendió el rumor de las apariciones de la Virgen.
El 13 de octubre, una multitud de hasta 100 mil personas, entre ellas numerosos periodistas, presenciaron el «milagro del sol».
Esta era una señal que había sido anunciada por la Virgen María, después de una lluvia torrencial que empapó el suelo y la ropa, el cielo se abrió y vieron como el sol cambió de color, tamaño y posición durante unos diez minutos. Después de lo acontecido, la ropa y el suelo aparecieron repentinamente secos.
Fue la última aparición de la Virgen de Fátima.
Cor Mariæ dulcissimum, iter para tutum! – Corazón Dulcísimo de María, prepara el camino seguro . A la Virgen de Fátima, San Josemaría
El mensaje de Fátima contiene un aspecto de exigencia cristiana universal: es necesario desagraviar al Señor por todos los pecados cometidos, hacer penitencia, rezar el Rosario, difundir la devoción al Corazón Inmaculado de María, y rezar mucho por el Papa.
Incluye, también, algunas revelaciones particulares que la Virgen hizo a los niños pastores en la aparición del 13 de julio. La Santa Sede dio a conocer todos los mensajes durante el pontificado de San Juan Pablo II.
Los dos primeros, las escribió Lucía en su diario al tomar los hábitos. El tercero, escrito el 3 de enero de 1944, lo entregó en un sobre sellado al obispo de Leiria, un sobre que luego se entregó en 1957 al archivo secreto del Santo Oficio y cuyo contenido fue revelado en 2000.
La visión del infierno
La Virgen de Fátima mostró a los tres niños pastores lo que les espera a las personas después de la muerte, si no se arrepienten, tuvieron la visión del infierno:
“Un gran mar de fuego que parecía estar debajo de la tierra. Sumergidos en ese fuego, los demonios y las almas…”
El sagrado Corazón y la conversión de Rusia
La segunda parte contiene estas palabras de La Virgen de Fátima:
«Vendré a pedir la consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón y la Comunión reparadora de los primeros sábados».
María habló de una guerra que comenzaría durante el pontificado de Pío XI. Y acertó. La Segunda Guerra Mundial estalló en 1939.
El Ángel y la sangre de los mártires
La tercera parte del secreto es desvelada por la Hermana Lucía “Los buenos serán martirizados y el Santo Padre tendrá mucho que sufrir; varias naciones serán aniquiladas.”
«Fátima es un tesoro para toda la Iglesia. No es un lujo, porque está todo hecho con mucha dignidad y sin ostentación. Pero es un tesoro: aquí los corazones y las almas se esponjan, aquí se palpa la Iglesia, se siente la presencia de la Santísima Virgen. Es algo que no se puede explicar, pero aquí se nota que la oración de Nuestra Señora es muy eficaz» Beato Álvaro del Portillo, Tertulia en el Santuario, 1985
El Papa Pío XI concedió el 1 de octubre de 1930 una indulgencia plenaria especial a los peregrinos de Fátima. Años más tarde, en 1942, Pío XII consagró la humanidad al Inmaculado Corazón de María.
Además, el Papa Juan Pablo II visitó personalmente el lugar de las apariciones en tres ocasiones. Una de sus visitas más relevantes fue cuando le entregó a la Virgen la bala con la que le habían disparado en la Plaza San Pedro. Para Wojtyla fue la Virgen de Fátima quien le salvó la vida en el ataque del 13 de mayo de 1981
También, Benedicto XVI visitó personalmente el lugar de las apariciones y consagró a todos los sacerdotes al Inmaculado Corazón de María.
Más recientemente, el Papa Francisco consagró su pontificado a la Virgen de Fátima y en mayo del 2017 visitó el Santuario para conmemorar los 100 años de las apariciones.
Virgen de Fátima: ¿Dónde está?
En la actualidad, en el lugar de las apariciones se encuentra el Santuario de Nuestra Señora del Rosario de Fátima. Un templo hasta el que cada año peregrinan miles de personas de todo el mundo.
El santuario de Fátima y el relato de las apariciones ha supuesto una ayuda para muchas personas.
A lo largo del siglo XX los católicos de Europa han acudido especialmente a la Virgen de Fátima para rezar por la paz y la reconciliación en el continente.
Al entrar en el Recinto de las Oraciones, en uno de los extremos se puede ver la Basílica de la Virgen del Rosario de Fátima, con su gran torre de 65 metros. En el centro se encuentra el monumento al Sagrado Corazón de Jesús y, en uno de los lados, la Capilla de las Apariciones, en el mismo lugar en el que la Virgen pidió a los pastorcitos que se construyese una capilla.
Fátima, altar do mundo
Fátima, altar do mundo, es una expresión corriente en Portugal. En Fátima concurren todos los caminos del mundo. Allí, como san Josemaría, el primer peregrino a este santuario que ha subido a los altares, van también hoy la mente y el corazón de tantos cristianos a rezar a la Virgen.
Mons. Javier Echevarría, durante una de sus estancias en Fátima, animaba a ponerse bajo la protección maternal de María Santísima en todas las circunstancias de la vida:
«Madre, ¡qué bien se está junto a ti! ¡Qué serenidad se siente en el alma pensando en que tú nos conoces, que tú nos entiendes, que tú nos ayudas, y que tú vas a presentar ante Dios nuestras necesidades muchísimo mejor de como lo podamos hacer cada uno de nosotros! Recurrimos a ti que eres la Omnipotencia Suplicante»
Bibliografia
fatima.pt
Barthas, C. La Virgen de Fátima
OpusDei.org
Aciprensa