Lo que tienes es covid
, le informó el médico. Esta noticia transportó a Heriberto a una época que había quedado atrás en su memoria, llena de recuerdos fragmentados como película experimental: calles desiertas, voces de pánico, días que se repetían sin cesar, rostros familiares asomados al celular, entregas a domicilio, y un fuerte olor a cloro, mucho cloro.
El doctor prosiguió: Te recetaré nirmatrelvir/ritonavir, un medicamento para covid ambulatorio. Debes comprar el tratamiento hoy mismo
.
Al escuchar el nombre tan poco común, Heriberto recordó que ese medicamento solía venderse en las farmacias a un precio que estaba fuera de su alcance y se sumió nuevamente en su pasado. Recordó a los amigos que no estaban, las largas filas para la prueba de covid, el miedo, la incertidumbre sobre qué era, por qué y cómo nos contagiábamos, los cumpleaños que pasó solo, la tensión de los días para recibir las vacunas, gracias vacunas, pensó. Fue entonces cuando el médico, presagiando lo que pasaba por la cabeza de su paciente, intervino: No te preocupes por el precio, ya no hay patente, así que podrás encontrarlo en genérico
.
Heriberto se sorprendió por la agudeza del médico, no obstante, dudó, cómo podría asegurar que un medicamento genérico es igual a uno de marca.
El doctor se anticipó de nueva cuenta a la pregunta y le explicó: Descuida, un genérico es un fármaco que contiene la misma sustancia activa, en igual cantidad y forma que un medicamento de marca. Los genéricos sólo se comercializan después de que la patente de marca expira, y es importante saber que, aunque son más económicos, pasan por los mismos controles de calidad y seguridad. Se someten a exhaustivas pruebas de eficacia, se evalúa el principio activo, la materia prima, el material de envasado, la validación del proceso de fabricación y de métodos analíticos. En fin, puedes confiar en ellos con total seguridad
.
Para garantizar que Heriberto y todos los ciudadanos tengan acceso a medicamentos genéricos de calidad, seguros y eficaces, debemos tomar medidas concretas desde ahora, como es el Fondo de Patentes de Medicamentos, donde se otorgan sublicencias a fabricantes de medicamentos genéricos que permiten garantizar la disponibilidad de fármacos.
Con este objetivo en mente, en la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) estamos trabajando para democratizar el acceso a los tratamientos médicos y asegurar la autosuficiencia sanitaria no sólo en México, sino en toda la región. Hemos ampliado la oferta terapéutica al autorizar genéricos, rompiendo monopolios que afectaban la economía popular y la sostenibilidad del sistema de salud. Además, perfeccionamos el marco normativo para establecer reglas claras y procesos de evaluación eficientes, lo que incentiva el desarrollo de la producción nacional.
Al desplegar estos planes a largo plazo, consideramos tres aspectos claves que conforman un triángulo de protección sanitaria para la población: la salud pública, la economía nacional y la integración regional. Nuestros objetivos son garantizar el acceso oportuno, seguro y de calidad a los tratamientos, impulsar el desarrollo del sector farmacéutico y de dispositivos médicos, y promover la consolidación del mercado regional, a través de la creación de una Agencia de Medicamentos de Latinoamérica y el Caribe.
Para alcanzar el futuro en el que Heriberto pueda acudir a la farmacia de su barrio y adquirir fármacos esenciales para su salud, trabajamos para que la Cofepris sea reconocida a escala mundial como la agencia reguladora de referencia regional por su rigor científico-técnico, poder de innovación y profunda vocación humanitaria. Asegurar el acceso a medicamentos genéricos es, sobre todas las cosas, un acto de justicia social.
Dedicado a Guerrita.
* Titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios