San Cristóbal De Las Casas, Chis.,
Unas mil 500 personas realizaron una peregrinación en el municipio de Sitalá, en la zona Norte Selva de Chiapas, para exigir seguridad y paz, con el argumento de que las causas del conflicto, enfrentamientos y guerras son muchas, pero el resultado es siempre el mismo: destrucción y crisis humanitaria
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En un comunicado, dijeron que con el corazón adolorido y con tristeza por la violencia imparable que se suscita en nuestro querido estado de Chiapas, hemos salido a peregrinar manifestando que a pesar de que la oscuridad envuelve nuestras comunidades, también creemos en la esperanza que nos da nuestro Dios, que se hizo niño en medio de un pueblo oprimido. También para nosotros y nosotras brillará la luz de la paz, la justicia y la verdad
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Los peregrinos, quienes afirmaron profesar la fe católica, pidieron “a nuestro gobierno local y a la institución encargada de la seguridad pública redoblar esfuerzos para que hagamos de Sitalá un pueblo fuera del control de cárteles, grupos armados, caciques, cantinas, prostíbulos, narcomenudeo y todo aquello que le resta vida a nuestras comunidades”.
Señalaron que “un actor importante y responsable para preservar la seguridad y la paz en la sociedad son los gobiernos local, estatal y federal. Como se describe en la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública en su artículo 2: ‘La seguridad pública es una función a cargo de la Federación, las entidades federativas y municipios, que tiene como fines salvaguardar la integridad y derechos de las personas, así como preservar las libertades, el orden y la paz públicos’”.
Agregaron: No podemos normalizar la violencia, y por eso hoy levantamos nuestra voz como nos invita el papa Francisco, para gritar que queremos paz para nosotros y para los municipios con mayor conflicto como Chicomuselo, Frontera Comalapa, Tila y Pantelhó, entre otros muchos
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Fuentes de la diócesis de San Cristóbal informaron que la peregrinación se realizó el sábado y que los participantes concluyeron su movilización con una misa oficiada por el cura Rodrigo José Pinto.
La construcción de la paz es responsabilidad de todos: iglesias, gobierno, escuelas, la comunidad y la familia. Como Iglesia católica, queremos asumir con responsabilidad nuestra parte
, expresaron.