Sobreviven cuatro
de 33 lenguas originales en Guerrero
El náhuatl, el mixteco, el amuzgo y el tlapaneco, cada una con varios dialectos.
De las 33 lenguas que se hablaban en Guerrero durante el siglo XVI, en la actualidad sólo sobreviven cuatro: el náhuatl, el mixteco, el amuzgo y el tlapaneco, las cuales se dividen en otros dialectos que muestran gran vitalidad.
Se informó al anunciar
Las lenguas desaparecidas no dejaron ningún testimonio, debido en parte a que los sacerdotes que acudieron a la zona se encargaron de catequizar a los indígenas y descuidaron la descripción de ellas.
La importancia de realizar investigaciones de carácter metodológico para recuperar datos de esas lenguas, a fin de clasificarlas y conocer los movimientos migratorios dentro del estado de Guerrero y su relación con otras áreas mesoamericanas.
De contar con estos conocimientos, la historia del México prehispánico y moderno podría cambiar tajantemente, de ahí la urgencia de hacer este tipo de trabajos, y esto es lo que se abordará en el encuentro a realizarse en Taxco, Guerrero.
Con la participación de 138 investigadores de instituciones académicas como las universidades Nacional Autónoma de México, Autónoma Metropolitana, de California y de Montreal, se realizarán varias mesas redondas para dar a conocer los avances de las investigaciones sobre el estado de Guerrero.
Los puntos de encuentro tocarán los temas:
«Las consideraciones para declarar Patrimonio Histórico al Centro de Chilpancingo»
«La investigación multidisciplinaria y su impacto social»
«El quehacer lingüístico».
«Priorización de los aspectos identitarios en las comunidades indígenas y mestizas para la aplicación de programas institucionales»,
«Prácticas rituales. Cosmovisión y mitología»
«El conocimiento antropológico en la definición de políticas públicas».
Durante las actividades, los arqueólogos harán el registro sistemático de sitios en el municipio de Ixcateopan; los lingüistas rastrearán las cinco lenguas de los grupos chontales; los etnohistoriadores buscarán códices y registros, y los antropólogos físicos trabajarán en población viva.
A su vez, los antropólogos sociales y etnólogos entrarán en contacto con las tradiciones y rutas comerciales, los historiadores investigarán la actividad minera, asunto en el que, según fuentes históricas, existía un grupo chontal cuya lengua se desconoce y tenía relación con esta labor.
La mesa redonda de Guerrero, que tiene lugar cada dos años, ha convocado a una amplia gama de investigadores de diversas disciplinas, entre ellos arqueólogos, antropólogos físicos y sociales, lingüistas, historiadores, etnohistoriadores y etnólogos.