«La sombra del caudillo»

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En La sombra del Caudillo, Martín Luis Guzmán 

Martín Luis Guzmán nació en Chihuahua, Chihuahua, el 6 de octubre de 1887. Realizó sus primeros estudios en la ciudad de México y en el Puerto de Veracruz.

En 1904 ingresó a la Escuela Nacional Preparatoria y, posteriormente a la Escuela Nacional de Jurisprudencia.

Destacado narrador y novelista de la Revolución Mexicana; con su pluma, observación y talento logró registrar los momentos más álgidos de la lucha revolucionaria.

En 1908 comenzó a trabajar en la redacción del periódico El Imparcial.

Interrumpió sus estudios de derecho para asumir el cargo de cónsul en Phoenix, Arizona; volvió a México en 1911 y formó parte de El Ateneo de la Juventud. En 1913 concluyó sus estudios universitarios.

Con Madero se desempeñó como bibliotecario en la Escuela Nacional de Altos Estudios y docente en la Escuela Superior de Comercio.

Molesto por el cuartelazo huertista renunció al cargo que desempeñaba y fundó el periódico de oposición El Honor Nacional.

……Así, sus tendencias políticas cambiaron rápidamente, primero se unió a los carrancistas, luego a los villistas y por último a los convencionalistas.

En 1915 partió al destierro voluntario, su primer destino fue España, en aquél país escribió y publicó su primer libro La querella de México.

Se trasladó a Nueva York en Estados Unidos, donde escribió su segundo libro, A orillas del Hudson.

En1920 volvió a México y fundó el diario El Mundo que fue vetado por Alvaro Obregón por el apoyo que brindaba al movimiento delahuertista.

Su oposición a Obregón lo llevó nuevamente al exilio en 1925, viajó a España donde permaneció once años; entonces publicó sus dos obras más reconocidas: El águila y la serpiente (1928) y La sombra del Caudillo (1929) 

Jaime Ramírez Garrido dice: 

 “en La sombra del Caudillo Martín Luis Guzmán hace una suerte de genética literaria para hacer confluir en el personaje del Caudillo a Calles y Obregón, en otro fusiona a De la Huerta con el general Francisco Serrano, en otro mezcla a varios gobernadores que participaron en las distintas rebeliones que surgieron para legitimar el movimiento revolucionario en México.  

Martín Luis Guzmán comentaba que leía las esquelas en el periódico desde el exilio en España; fueron las publicadas por los asesinatos de Huixquilac las que inspiraron la creación de la novela.  

Juntó los asesinatos provocados por la campaña antirreeleccionista de Francisco Serrano con los sucesos que él mismo vivió con la rebelión de De la Huerta — que lo llevó al exilio—”. 

El escritor Fernando Curiel sostiene:

 “Martín Luis Guzmán no es una regla sino una excepción de la literatura mexicana. Dentro de su grupo literario y político no se caracterizó por ser un militante o un miembro constante o cumplido, sino por ser independiente. Mientras que no formó parte del sistema _antes de la Revolución Institucionalizada_ estuvo en las revoluciones perdedoras como villista, convencionalista y delahuertista. Perteneció a la oposición alrededor de cuarenta años de su vida política activa”.

Jaime Ramírez Garrido señala:

“en El águila y la serpiente se dejan entrever las memorias de un joven universitario que va conociendo a diversos personajes revolucionarios y que los describe de manera magistral. En esa obra hace retratos literarios impresionantes de Venustiano Carranza, Lucio Blanco, Felipe Ángeles y Francisco Villa, entre otros. Todos son personajes históricos que con dos o tres trazos quedan perfectamente abordados y completos”.

“en La sombra del Caudillo en cambio, encontramos una serie de acontecimientos que no sucedieron tal cual pero que sin embargo nos muestran una suerte de esquema del destino trágico de las revoluciones cuando se presenta una escisión. Ese es el caso específico de México. En La sombra del Caudillo ninguno de los personajes es real del todo, pero todos tienen uno o varios referentes de realidad”.

Fernando Curiel comenta:

“indudablemente las obras fundamentales de Martín Luis Guzmán podrían mencionarse en este orden: La sombra del Caudillo y El águila y la serpiente. Aunque también es importante leerlo como ensayista y cronista; valdría la pena conocerlo desde su primer libro La querella de México en adelante”.

 

La Colección de la Academia, por ejemplo, está formada por una serie de discursos que dio como miembro de la Academia Mexicana de la Lengua y que son textos verdaderamente portentosos. Así, está un Guzmán obvio que es el de las dos grandes novelas y un Guzmán anterior, que para su generación era un gran ensayista y se pensaba, un escritor desperdiciado. Sólo le bastaron dos años y dos obras para colocarse al frente de su generación”.

Jaime Ramírez Garrido dice: 

 “en La sombra del Caudillo Martín Luis Guzmán hace una suerte de genética literaria para hacer confluir en el personaje del Caudillo a Calles y Obregón, en otro fusiona a De la Huerta con el general Francisco Serrano, en otro mezcla a varios gobernadores que participaron en las distintas rebeliones que surgieron para legitimar el movimiento revolucionario en México”.  

……Jaime Ramírez Garrido sostiene: 

 “Martín Luis Guzmán establece una frontera en la literatura mexicana; hay un antes y un después de él. La novela anterior aún se encuentra anclada al siglo XIX: en el campo y con cierta forma de naturalismo o costumbrismo. 

Martín Luis Guzmán traslada la novela a las ciudades no abandona el paisaje pero el paisaje es visto desde la ciudad. Incluso él es muy distinto al resto de los novelistas de la Revolución como Mariano Azuela, Gregorio López y Fuentes y Urquizo; es muy diferente porque el se va directo a la política y no a la Revolución como esa bola que va por ahí de un lado a otro, reclutando campesinos que se unen a una causa a veces claramente, a veces no.  

Él va más allá, describe cómo fue la construcción del México contemporáneo a través de la invención de una legitimidad de Caudillos que pasaron de la guerra a la política y que trasladaron las prácticas de una a la otra. Puedo afirmar que esa es la importancia fundamental de la obra de Martín Luis Guzmán en la literatura mexicana 

Martín Luis Guzmán 

……En 1936 volvió a México, en ese año fue publicado su libro Memorias de Pancho Villa, donde —a modo de ejercicio literario— escribió la vida del personaje como si se tratara de una autobiografía.  

En el ámbito político apoyó y participó en la vida de las Instituciones originadas por la Revolución. Fue un incansable impulsor de la industria editorial, por lo que en 1939 fundó la editorial Ediapsa.  

En 1940 fue nombrado miembro de la Academia Mexicana de la Lengua y fue fundador, editor y redactor de la revista Tiempo. Ocupó diversos cargos públicos; entre ellos, fue presidente vitalicio de la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuito y senador de 1969 a 1976, año en que muere en la ciudad de México.  

En 1958 fue reconocido con el Premio Nacional de Literatura.