A/H1N1: CUMBIA DE
Agustín Escobar Ledesma
Desde que apareció el mutante virus de la influenza porcina mexicana, estoy de mírame y no me toques. Encerrado entre cuatro paredes escucho La cumbia de la influenza, con la que bailo hasta desmayar: Es la noticia del día/ La influenza ya llegó/ Compren todos medicina pa’ enfrentar al batallón. / Ya mejor que te de un sida/ Un cáncer o comezón/ Hoy mas vale ser suicida con taquitos de pastor./ Porque dicen que es la gripa perfecta/ Porque dicen que es la gripa perfecta/ No te vayas a perder cuñado todo se acabó.
En los canales de desagüe, machacan todo el santo día para que me lave las manos cada vez que toque el oscuro objeto del deseo. Es por eso que, curándome en salud, me abstengo de dar o recibir besos en cachetes, trompa y nenepil. ¡Ay, Martí! ¿Dónde quedó el amigo sincero que me da su mano franca? Por supuesto que tampoco voy a misa ni de relajo, como canta El Personal.