Atenco: A la orilla del agua

San Mateo Atenco

Parte alta de la fuente de la plaza central con la figura de un zapatero remendón.

Foto: OEM-Informex

Organización Editorial Mexicana

Emilio Gandarilla Avilés

El la población de San Mateo Atenco, está ubicada en el Estado de México, a 15 kilómetros al oriente de la ciudad de Toluca, capital del estado.

Los primeros pobladores, de una parte del valle de Toluca, fueron las tribus nahuatlacas en el año de 640 dc. Fundaron varios pueblos, entre ellos San Mateo Atenco con el nombre de «atengo», palabra náhuatl que significa: «en la orilla del agua».

En 1427, Izcoatl, monarca de los mexicas, inicia la expansión del imperio azteca, dominando la zona de Atenco, pueblo que quedo como tributario de los aztecas.

Después de la conquista de los españoles en el siglo XVI, Fray Andrés de Castro, junto con otros franciscanos iniciaron la evangelización de los indígenas, construyendo una iglesia en el centro del pueblo con la primera capilla abierta edificada en México, esta iglesia es ahora la parroquia de la región y desde su inicio fue dedicada al apóstol San Mateo, lo que originó que se le agregara el nombre del santo, al del pueblo.

En esta región se han descubierto fósiles de restos de mamuts, grandes animales que pudieron desarrollarse en la región por los múltiples lagos y lagunas que se formaron en las llanuras y que permitían la existencia de esos animales.

En un principio sus habitantes se dedicaron a la agricultura, cuando se formaron grandes haciendas agrícolas para sembrar los campos en las cercanías del pueblo, los campesinos se convirtieron en trabajadores de las haciendas que explotaban los campos de la región.

En el año de 1873, un grupo habitantes de San Mateo Atenco, incursionó en la producción de calzado en talleres familiares, esa nueva actividad tuvo mucho éxito lo que propicio que se acrecentara rápidamente esta incipiente industria, llegando a alcanzar un gran auge, de tal manera que actualmente San Mateo Atenco se ha convertido en un gran mercado de zapatos y artículos de piel, donde todos los días concurren cientos de mayoristas a comprar mercancía, los visitantes que llegan a este sitio salen con zapatos nuevos para toda la familia.

La pequeña ciudad fue designada cabecera del municipio, ahora presenta amplias calles pavimentadas, la parroquia de san mateo, con su capilla abierta, es un majestuoso edificio, el palacio municipal, se encuentra frente a la gran plaza ocupa un edificio colonial, en el centro de la plaza se construye una fuente, con la figura de un zapatero remendón labrada en piedra rosa, en el centro.

Además de adquirir los artículos ya descritos, los visitantes pueden comprar diversos muebles de madera y otras artesanías, es un lujo saborear los exquisitos platillos preparados con los famosos chorizos de Toluca y diferentes clases de sabrosos hongos.

Se llega a san matero Atenco tomando desde la Ciudad de México la carretera a Toluca, la desviación para la señal para entrar al pueblo, que se encuentra al borde de la carretera, es la enorme escultura del general Zapata montando un brioso corcel

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