Preocupa a CIDH violación de derechos humanos y

laborales de jornaleros agrícolas de Guerrero 

·         Tlachinollan y la DFPL denuncian en audiencia desinterés del Estado mexicano con este sector.

·         Resaltan tratos discriminatorios y deshumanos por parte de empresarios agrícolas.

·         Solicitan a CIDH visita IN-LOCO a campos agrícolas para constatar  condiciones en que laboral los jornaleros. 

Tlapa, Guerrero a 5 de noviembre del 2005.- En audiencia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) con sede en Washington D.C, representantes del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan y de la Fundación para el Debido Proceso Legal, denunciaron hoy el desinterés del Estado mexicano para revertir el trato discriminatorio, deshumanizante y de explotación que padecen miles de indígenas de la montaña de Guerrero por parte de empresarios agrícolas.

 

Resaltaron que las autoridades de México carecen de mecanismos de control y vigilancia que permitan regular la contratación de los trabajadores del campo; que continúa el trabajo infantil y las muertes de niños en los surcos; e insistieron en que los programas sociales que implementa el gobierno son más de carácter asistencialista y por lo tanto no superan el problema de marginación y pobreza extrema en Guerrero.

 

También, durante su participación de 20 minutos aproximadamente, los representantes de Tlachinollan y el FDPL, solicitaron a la Relatoría Especial sobre Trabajadores  Migratorios y Miembros de sus Familias que incluyan en su agenda la migración interna e invitaron a las Relatorías sobre Derechos de Pueblos Indígenas, sobre los Derechos de Mujer y sobre los Derechos de la Niñez realizar una visita por los campos agrícolas del norte del país.

 

Esta audiencia que se tituló Derechos humanos de los jornaleros indígenas migrantes de Guerrero, se llevó a cabo el día de hoy (de 11 a 12 del día, tiempo de México), en el edificio de la Secretaría General de la Organización de Estado Americanos (OEA) que tiene su sede en Washington D.C., Estados Unidos.

 

La delegación  de Tlachinollan estuvo integrada por el coordinador del Área Jurídica, Vidulfo Rosales Sierra; la coordinadora del Área de Migrantes, Margarita Nemesio Nemecio y la coordinadora del Área Internacional, Cristina Hardaga Fernández; mientras que por la  FPDL (que tiene su sede en Washington) participó Emilie Jolie.

 

Por parte del Estado mexicano acudieron: el secretario de Asuntos Indígenas de Guerrero, Crispín de la Cruz Morales y Alonso Martínez Ruiz, representante alterno de Misión Permanente  de México de la Secretaría de Relaciones Exteriores ante la OEA. Ambos sólo centraron sus intervenciones enlistando los programas sociales y las acciones mediáticas que ejecutan las autoridades en la región de la Montaña, para hacer frente a la problemática de los jornaleros agrícolas.

 

Preocupa a la CIDH explotación y muerte de jornaleros agrícolas  

En su intervención el Relator para México, Florentín Meléndez calificó de preocupante el hecho de que se registren muerte de niños en las agroindustrias y criticó que el gobierno de Guerrero más allá dar seguimiento puntual a los derechos laborales de los jornaleros en los campos agrícolas, sólo se limite a hacer inspecciones extraordinarias “cuando deberían ser ordinarias”.