“Alarmante”incremento de precios de los comestibles en el orbe, advierte la FAO
En diciembre pasado alcanzaron un nuevo máximo; pueden subir más, señala
Descarta crisis similar a la de 2008, la cual causó protestas en varias naciones
Los precios de los alimentos en el mercado mundial alcanzaron un nuevo récord en diciembre, un hecho “alarmante”
pero sin riesgo de una crisis como la de 2008, reportó este miércoles la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). El valor del maíz, del trigo y de otros granos podrían subir mucho más y las actuales condiciones climáticas son una preocupación, añadió.
En su indicador de precios alimentarios, en el que analiza 55 productos, la FAO señaló que en diciembre pasado el encarecimiento superó los niveles de la crisis de 2008, cuando el aumento en el costo de los víveres causó protestas en varios países.
Precisó que en el último mes de 2010 la evolución de los 55 productos alimentarios llegó a los 214.7 puntos, frente a los 206 de noviembre pasado y a los 213.5 de junio de 2008. El índice mide los cambios de precios mensuales para una muestra de alimentos que incluye cereales, aceite, lácteos, carne y azúcar.
La FAO calificó de “alarmante”
la situación, aunque descartó una nueva crisis alimentaria como la de 2008. Ese nivel, impulsado por los precios del azúcar, los cereales y las oleaginosas, fue el más alto desde que comenzaron los registros en 1990.
El economista Abdolreza Abbassian, de la FAO, expresó en una entrevista con Reuters que esa agencia de Naciones Unidas está preocupada por la incapacidad de predecir las actuales condiciones climáticas.
“Aún hay espacio para que los precios suban mucho más, si, por ejemplo, el clima seco en Argentina se convierte en sequía y si empezamos a ver problemas por las heladas en el hemisferio norte con la cosecha de trigo”
, agregó.
Abbassian precisó que, a pesar de los altos precios, muchos de los factores que dispararon los saqueos de alimentos en 2007 y 2008 –como una débil producción en países pobres y una repentina escalada del petróleo– ahora no están presentes, lo que reduce el riesgo de más turbulencias.
La combinación de mayores precios del petróleo y de los combustibles, el creciente uso de biocombustibles, un clima adverso y el alza de los mercados de futuros impulsaron al alza los precios de los alimentos en 2007-2008, lo que provocó violentas protestas en países como Egipto, Camerún y Haití.
En septiembre, 13 personas murieron en Mozambique en los disturbios que siguieron a un alza de 30 por ciento en los precios del pan tras un salto en los valores mundiales del trigo.
Los precios de los granos aumentaron en 2010. Los valores europeos del trigo se duplicaron por una serie de fenómenos climáticos como una sequía en Rusia y sus vecinos del mar Negro, mientras que los del maíz estadunidense subieron más de 50 por ciento, y los de la soya aumentaron 34 por ciento.
Las bajas existencias de granos como el maíz implican que más problemas climáticos podrían ser críticos para los mercados. China, en particular, posee un enorme apetito por el maíz y está dispuesta a asegurarse las existencias necesarias para satisfacer su demanda.
Inflación
“Los fundamentos del mercado del maíz son claramente los más ajustados”
, explicó el analista Emmanuel Jayet, de Société Générale. Los precios del crudo también han subido ante el resurgimiento de la demanda mundial, lo que ha aumentado la preocupación por una combinación de mayores precios de alimentos y energía para los países emergentes con necesidades de importación, agregó Abbassian.
“Los países emergentes de rápido crecimiento son más vulnerables”
, indicó Jayet, quien mencionó a India y China. Sin embargo, el analista no espera que el precio del petróleo impulse a los mercados de granos y semillas oleaginosas como ocurrió en 2007-2008.
El índice de precios del azúcar de la FAO se disparó en diciembre a un récord de 398.4 puntos, desde los 373.4 de noviembre.
A su vez, el índice de precios de cereales, que incluye alimentos básicos como trigo, arroz y maíz, subió a 237.6 puntos en diciembre, su mayor nivel desde agosto de 2008.
El índice de precios de aceites llegó en diciembre a 263 puntos desde los 243.3 que tuvo en noviembre.