UNESCO: en peligro de desaparecer, 143 variantes lingüísticas en México
Entre ellas están el aguateco, el ayapameco y el lacandón, advierte
Indígenas de la etnia zoque de la comunidad de Copoya, ubicada a 20 kilómetros de la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, preparan los incensarios con los que consagrarán los terrenos donde se realizarán las ceremonias tradicionales de este mesFoto Notimex
Emir Olivares Alonso
La Jornada
De las 364 variantes lingüísticas que existen en México, 143 se encuentran en peligro, aseveró la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
A unos días de que se celebre el Día Internacional de la Lengua Materna (el próximo 21 de febrero), el organismo internacional informó que su oficina en México está comprometida con la salvaguarda y revitalización de estos casi 150 idiomas en peligro, en especial con 10 que se hablan en Chiapas.
Los datos son parte del más reciente Atlas de las Lenguas en Peligro, elaborado por la Unesco en 2010, donde se advierte que la mitad de los 6 mil idiomas existentes en el mundo está en riesgo.
De acuerdo con el reporte de la Unesco, de las 143 lenguas que se encuentran en peligro en territorio mexicano, 52 están en situación de vulnerabilidad, 38 en peligro, 32 en la categoría seriamente en peligro y 21 en situación crítica.
“México es considerado uno de los países con mayor diversidad lingüística y cultural. Existen 364 variantes lingüísticas en el país, además de la lengua de señas, todas ellas están reconocidas como lenguas nacionales por mandato de ley”, sostuvo la oficina de la organización en México.
Se enlistan algunos de los idiomas que se encuentran realmente en peligro de desaparición en México.
En situación crítica aparecen, entre otros, el aguateco, con sólo tres locutores, ubicado en comunidades mayas de Campeche; el ayapameco, de Tabasco, con ocho hablantes; ixcateco con 21 personas que aún lo hablan en Oaxaca; ijilo, de Campeche, con 64 locutores; 35 personas hablan el cachiquel, ubicadas entre Campeche y Quintana Roo; el quicapú de Coahuila tiene 144 parlantes; el kiliwa, 56 en Baja California, y el lacandón de Chiapas, 563.
Identificadas por la Unesco como lenguas seriamente en peligro aparecen varias en Chiapas, como el quiché, con 226 hablantes; el zoque meridional, con 312, y el jalateko, con 504. En este rango también están el popoloca central, en Puebla, con 641 locutores; el cocopa, con 206 en Baja California y Sonora, y el chocolteco del este de Oaxaca, con 181 hablantes.
La oficina de la UNESCO en México aseguró promover “la diversidad lingüística, la interculturalidad y las particularidades asociadas al trabajo con pueblos indígenas de forma transversal en todos los sectores, programas y proyectos”.
En ese sentido, informó que concretamente el sector de educación de la oficina está desarrollando acciones en educación no formal, sobre todo, actividades artísticas para la convivencia pacífica en el estado de Chiapas.
Las nuevas tecnologías
Este año, el tema elegido por la Unesco para celebrar el Día Internacional de la Lengua Materna es Las tecnologías de la información y de la comunicación para la protección y la promoción de las lenguas y de la diversidad lingüística. Para ello, se pondrá relieve el enorme potencial de las nuevas tecnologías para salvaguardar, documentar y promover el uso de idiomas maternos.
Mediante un comunicado, se difundió un mensaje de la directora general de la Unesco, Irina Bokova, a propósito de esta conmemoración. La funcionaria subrayó que cada lengua representa una manera única de entender, escribir y expresar la realidad, de tal manera que el próximo 21 de febrero será una ocasión significativa para reconocer su importancia y para resaltar la necesidad de redoblar esfuerzos en favor del plurilingüismo y la diversidad lingüística.
“Debemos aprovechar el poder del progreso para salvaguardar las diferentes visiones del mundo, las distintas cosmogonías y la variedad de culturas, esto para promover todas las fuentes de conocimiento y las múltiples formas de expresión”, señaló Bokova.