¿Comerías insectos y flores?, son ricos y un negocio
El consumo de insectos y flores disminuye los impactos negativos al medio ambiente y reactivaría la economía local
Veracruz, Ver.-
Además de una alternativa de nutrición, el consumo de insectos y flores disminuye los impactos negativos al medio ambiente y reactivaría la economía local, pero se requiere regulación de las autoridades para su producción, promoción, distribución y consumo.
De acuerdo con el licenciado en gastronomía Mario Ismael Piñón Melgarejo a nivel internacional solo el Estado de Oaxaca es reconocido por el consumo del chapulín, sin embargo, Veracruz también cuenta con una extensa biodiversidad de insectos comestibles, pero todo está desperdiciado porque ninguna autoridad ha apostado por impulsar su consumo.
Opinó que con la promoción en el consumo de insectos se podría reactivar la economía local ya que algunas zonas podrían comercializar los insectos todo bajo regulación.
Puntualizó que algunos insectos tienen más proteína que la carne; por ejemplo, el grillo seco aporta 9.3 por ciento de proteína, es decir arriba del 60 por ciento.
El también gerente ejecutivo de Melbugs, mencionó que insectos como escamol, el gusano rojo de maguey y el gusano blanco están sobrexplotados y están en riesgo de desaparecer por lo que se requiere una concientización.
En ese sentido insistió en la creación de leyes para el consumo de insectos para abrir mercado e impulsar su economía.
“Hay muchas cosas ilógicas en las leyes, vas al norte y matan a los alacranes con insecticida y no pasa nada y los traes al sur y porque los traes para acá y te los estas comiendo te quieren meter a la cárcel, entonces si hay que analizar esa parte, se necesita regular aquí en Veracruz y en todo el país«.
Contrario a Veracruz en Oaxaca hay restaurantes que ofrecen platillos de tipo indígena y prehispánicos, algunos a base de insectos y esta oportunidad de mercado es aprovechada por comerciantes como Francisco Bernabé Coria Vázquez habitante de la región montaña del estado de Veracruz quien en cada temporada de producción de la llamada “hormiga chicatana” la comercializa en el vecino estado.
“Esta hormiga se ha visto afectada, no está en peligro de extinción, sino que se ha visto afectada ya que cada vez su habitar se ve más amenazada por la destrucción de plantíos en algunos casos para dar paso a otras siembras, el uso de químicos, pesticidas, no se dan cuenta que la chicatana es una importante fuente de ingreso y que su demanda va en aumento por su valor nutricional”, mencionó.
Comentó que anteriormente la chicatana era considerada como un platillo para pobres, pero su demanda ha ido aumentando y actualmente restaurantes reconocidos a nivel internacional ubicadas en Oaxaca compran este tipo de productos, que ahora tienen una alta demanda.