Imágenes de la ciudad tres fotógrafos

Imágenes de la ciudad tres fotógrafos

Omar López Monroy

 

Antes de que nos olviden/ Haremos historia

Caifaness

 

Los primeros años

Desde distintas trincheras, Alfredo Estrella, Antonio Nava y Octavio Nava participaron en los movimientos sociales de los años ochenta que se derivaron de las crisis económicas, sociales y políticas; eran los tiempos en el poder de Miguel de la Madrid y Carlos Salinas. Antonio y Octavio se forjaron al calor del Consejo Estudiantil Universitario de la UNAM; posteriormente los tres fueron testigos del temblor de 1985 en la capital del país y la efervescencia social que se derivó de esta catástrofe: preámbulo de importantes transformaciones en la ciudad.

Estos tres fotógrafos comenzaron su acercamiento con la fotografía cuando cursaban la educación media superior. De manera directa e indirecta abrevaron en la visión del maestro Lázaro Blanco (1938-2011) –uno de los mejores autores de su generación– en torno al quehacer fotográfico, y en la ruta que para entonces había trazado el hoy extinto Consejo Mexicano de Fotografía, creado en 1978.

En 1991, en el Museo Franz Mayer, Antonio y Octavio vieron la retrospectiva del fotoperiodista suizo Werner Bischof (1916-1954), la cual marcaría su visión en torno a la fotografía. Por su parte, Alfredo se vio influenciado por la obra de autores como Antonio Turok, en particular el libro Imágenes de Nicaragua (Casa de las Imágenes, 1988). Fue en las calles chilangas que se concibieron como fotógrafos mientras retrataban escenas cotidianas, marchas, y manifestaciones que irrumpían en el tiempo de la ciudad.

 

Fin de siglo

La generación de estos tres creadores es heredera de las y los fotógrafos que enarbolaron la fotografía como un factor de cambio social, e inevitablemente eso dejó huella en sus intereses. En 1993 surgió la Agencia Visual y Escrita Sociedad Cooperativa Limitada (AVE Fotos), con la clara alusión a la Agencia Magnum, recuerda Antonio Nava, quien junto con su hermano Octavio la encabezaron, y fue de las pocas agencias de aquella época creada por jóvenes fotógrafos, si no la única; por medio de la agencia Alfredo conoció a los hermanos Nava. A la par de este proyecto se creó la revista Imagen 35, pensada como el brazo editorial de la agencia, pero que sólo alcanzó a tener un primer número en 1994.

Ese mismo año, los tres acudieron a Chiapas a cubrir el levantamiento armado encabezado por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Más tarde, en 1996, Alfredo y Antonio viajaron al estado de Guerrero para documentar el evento realizado a un año de ocurrida la llamada masacre de Aguas Blancas, dentro del cual surgiría el Ejército Popular Revolucionario. Entretanto, Octavio retrató a los grupos armados Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente en 1999 y a las Fuerzas Armadas Revolucionarias del Pueblo en 2000 ?movimientos sociales y armados conectados con la guerrillas urbana y rural, surgidas a partir de la década de los sesenta en el país.

Por esos mismos años de fin de siglo, Alfredo, Antonio y Octavio expusieron su obra en la galería callejera fotográfica De la calle y en la calle, instalada al interior del célebre Tianguis del Chopo, e impulsada por un colectivo de fotógrafos entre los que se cuentan a Gregorio Cortés, Regino Castro, Antonio Oropeza y Mario Palacios, coordinada por Enrique Rivera Barrón, entre 1994 y 2006. Gregorio invitó a estos tres autores y a otros fotógrafos independientes de aquella época a la galería,
que sirvió también como punto de encuentro
para varios jóvenes chilangos que se iniciaban en el oficio.

Paulatinamente los tres fueron consolidando su paso por la fotografía, al tiempo que sumaban experiencias en torno a la difusión, promoción
y exhibición. En 1996 Alfredo se convirtió en colaborador de este diario; por su parte, Antonio y Octavio incrementaron su presencia en los medios nacionales manteniendo su actividad de manera independiente.

 

Imagen colectiva

En los últimos años del siglo pasado, Alfredo Estrella y Antonio Nava plantearon unas charlas fotográficas en el Bertico Café, ubicado en el centro de la ciudad. De esta convivencia en la que participaron fotógrafos independientes y otros que ya eran parte del equipo fijo de algún periódico, surgió la idea de crear el sitio electrónico Ittaphoto, el cual nació en 2001, pensado como una revista bimestral en torno al medio fotográfico, y que llegaría a tener poco más de tres años de vida.

Ittaphoto presentó en 2003, en el Centro de la Imagen, una compilación en un CD-Rom de los mejores trabajos publicados en el sitio hasta entonces. En dicha presentación participaron el destacado fotógrafo Pedro Meyer –creador por esa época del sitio https://zonezero.com/es/– , fundador junto con el referido maestro Lázaro Blanco del hoy cuasi mítico Consejo Mexicano de Fotografía, y el fotoperiodista Omar Meneses (1961-2018), impulsor junto con su compañera Cecilia Candelaria, de la colección de fotolibros Ojo de Venado. Algunos de los autores publicados en Ittaphoto, entre ellos Alfredo Estrella, aparecerían en esta colección.

Antonio, Alfredo y Octavio han vivido el cambio cultural que ha significado la digitalización de la imagen; además de que su involucramiento en diversos proyectos a lo largo de este tiempo les ha permitido conocer diversos aspectos de la producción fotográfica.

 

El instinto de la mirada

En los albores del nuevo siglo, Alfredo comenzó a colaborar con AFP (Agence France-Presse), hasta convertirse en fotógrafo staff de la misma en 2013. Es un fotógrafo certero, invariablemente busca estar cerca del hecho noticioso y ha realizado coberturas periodísticas complejas, como la del movimiento social encabezado por la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca en 2006. Antonio mudó su residencia a Los Ángeles, California, entre 2004 y 2012, y trabajó en la agencia Prensa Internacional, una experiencia que enriqueció su forma de mirar y pensar la fotografía, lo cual sin duda ha marcado su forma de trabajo, el cual sigue mostrando en el diario El Heraldo de México, donde actualmente colabora. Por su parte, sumado a sus actividades la docencia de la fotografía, Octavio ha consolidado sus conocimientos en torno a la comunicación y la política; varias de sus imágenes inevitablemente tienen una fuerte carga ideológica.

En 2012, junto con Federico Gama, Alfredo, Antonio y Octavio crearon Retina Magazine, publicación digital especializada en fotografía contemporánea, en buena medida heredera de los procesos colaborativos en los que se han visto involucrados. De tal suerte, el trabajo colectivo sigue siendo una ruta en la trayectoria de estos autores, que han participado en decenas de exposiciones individuales y colectivas, y mostrado su trabajo en diversas publicaciones. Sus imágenes llenas de vitalidad, contundentes, e incluso con un dejo de furia –chilanga– por atrapar el instante en que acontece el suceso noticioso, son parte de nuestra memoria colectiva. Abordar su trabajo sirve para reivindicar también a las y los fotógrafos que han retratado nuestra inmensa Ciudad de México y lo seguirán haciendo.

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