«Ensayos» En la obra todo en el grupo explota por una infidelidad. Se desarrolla con cuatro monólogos

Emociones y reproches estallan en Ensayo, propuesta escénica de Pascal Rambert

La obra, dirigida por Juan Manuel García Belmonte, empezó temporada en el Teatro El Milagro

El montaje se estrenó ayer.
Juan José Olivares
La Jornada

Lo que no se ve en el teatro, se dice. Y así, dos parejas de actores que también son amigos, se dicen lo que ya no pueden fingir en uno de los ensayos para preparar una nueva puesta. Desde hace 20 años integran una compañía que denominan la estructura.

Pese a compartir un pasado lleno de vivencias y de deseos, lo que les confiere una identidad, estos cuatro personajes implosionan inexorablemente en la mesa de trabajo, porque la verdad de la vida está en una ficción, así se escucha en Ensayo, obra del dramaturgo francés Pascal Rambert, que tiene temporada en el Teatro El Milagro desde ayer y hasta el 30 de agosto, de jueves a domingo.

En un texto complicado, pleno de metáforas y viñetas casi filosóficas sobre la vida, Rambert hizo una disección amarga de la crisis del mundo occidental. María Inés Pintado, Sonia Couoh, Daniel Martínez y José Carried introducen al espectador por el inconmesurable camino de los deseos frustrados.

En la obra todo en el grupo explota por una infidelidad. Se desarrolla con cuatro monólogos de una duración de 30 minutos. Uno por uno narra con intensidad los afanes afincados en sus cajas toráxicas. Como catarsis, erupcionan un sinnúmero de temas que se clavan en la sique del espectador, que tiene pocas oportunidades de reciclar, en el momento, tanta información dura.

El montaje de Rambert, dirigido por Juan Manuel García Belmonte y producido por Hanna Berumen, es una arriesgada propuesta escénica. Los cuatro protagonistas se encuentran en pleno ensayo de una obra, y en un paréntesis, se produce todo ese estallido de emociones y cruce de reproches.

Fracaso del arte

Sonia, dolida por el engaño, es la que suena las primeras campanas con una lluvia de reclamos y gritos, o como dicta la breve sinopsis del montaje, es la primera en tomar la palabra, la que activa las alarmas que exponen el fracaso del arte. Pero también su pareja, Pepe, quien es el escritor del grupo; María Inés, la otra actriz y Daniel, director de la trouppe a la que ven como familia vomitan sus fracasos, sus decepciones y sus anhelos, porque en esta estructura no es la expresión histriónica lo que está en juego, sino el nacimiento de una pasión.

En cada línea se puede apreciar la debilidad del mundo occidental, poniendo a estos cuatro personajes frente a las interrogantes sobre la naturaleza del arte, pero aún más acerca de la condición humana.

Ensayo dura dos horas sin intermedio. Las funciones son jueves y viernes a las 20 horas; sábado, a las 19 y domingo, a las 18.

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